Áñez ratifica candidatura pese a críticas en Bolivia
LA PAZ, Bolivia (AP) — La presidenta interina Jeanine Áñez seguía haciendo oídos sordos a las críticas contra su candidatura a la presidencia de Bolivia y ratificó el martes su decisión de buscar el poder después de un leve ajuste a su gabinete de ministros.
“Voy a ser presidenta y candidata al mismo tiempo sin cometer ningún acto inconstitucional”, señaló en el acto de toma de juramento de su gabinete, en el que ratificó a 17 autoridades y cambio a tres.
Áñez pidió el fin de semana la renuncia de todo su equipo ministerial después de que la ministra de Comunicación, Roxana Lizárraga, renunciara y rechazara públicamente la decisión de la mandataria de postularse. En su lugar, Áñez nombró a la periodista Isabel Fernández, en la cartera de Educación posesionó al ex vicepresidente, Victor Hugo Cárdenas, y en Desarrollo Rural y Tierras a Eliane Capobianco.
A la par, las campañas electorales arrancaron. Luis Arce, candidato por el Movimiento Al Socialismo (MAS), partido del expresidente Evo Morales, llegó al país desde Argentina e inició su promoción aunque la fiscalía le entregó una citación para que declare por un caso de desfalco en el Fondo Indígena, el cual promovía un proyecto en las áreas rurales.
Áñez anunció que haría campaña al terminar su jornada laboral y en fines de semana. También aseguró que no utilizaría recursos estatales.
La gobernante hizo el anuncio de su candidatura el viernes y desató gran polémica porque al asumir el poder aseguró que so gobierno sólo sería de transición. Para algunos analistas, su anuncio sobre la candidatura favorece a los aliados de Morales, debilita al gobierno y perjudica a otros contendientes de los comicios del 3 de mayo.
“Yo he buscado alianzas y no las he encontrado. Ante la dispersión del voto he decidido postularme”, mencionó Áñez.
La mandataria asumió el gobierno en medio de una crisis política y social ocasionada tras los fallidos comicios del 20 de octubre. La situación se complicó con la renuncia y posterior salida de Morales, que se fue asilado a México. Actualmente el exmandatario está refugiado en Argentina, donde conduce la campaña de su partido.