Frenar a Mahomes, el mayor desafío de la defensiva de 49ers
SANTA CLARA, California, EE.UU. (AP) — Con una temible línea de cuatro frontales capaces de presionar a los quarterbacks sin necesidad de hacer blitz, un cornerback de élite con Richard Sherman y veloces linebacker y safety capaces de limitar la cantidad de jugadas de gran avance ofensivo, los 49ers de San Francisco contaron con la más férrea defensiva aérea de la NFL en una década.
El contener el ataque por aire de Patrick Mahomes y los Chiefs de Kansas City en el Super Bowl será por mucho el más duro desafío que cualquiera de los 49ers haya enfrentado esta temporada.
“Su movilidad es única. La fuerza de su brazo es ridícula. Es exageradamente preciso”, afirmó el coordinador defensivo Robert Saleh. “Pero por lo que creo que la gente no le da el crédito suficiente es por el hecho de que realmente hace el papel de quarterback. Existen muchas personas, muchos quarterbacks en esta liga que se niegan a asumir ese rol y optan por convertir el juego en un estilo callejero. Él se deshace del balón a tiempo. Lo coloca donde debe estar. Conecta muchos pases en ritmo. Y cuando necesita hacer la jugada clave, sabe cómo ganar tiempo en la bolsa y hacerlo. Así que es una súper estrella en todas las maneras imaginables posibles y va a ser difícil lidiar con él”.
Los 49ers de antemano han tenido que enfrentar a Mahomes en su breve pero brillante carrera. En la tercera jornada de la temporada de 2018 en el primer año de Mahomes como quarterback titular de Kansas City, lanzó para 314 yardas y encabezó tres series de touchdown en cinco posesiones en la primera mitad de la victoria de los Chiefs por 38-27.
Esa fue la única ocasión en las últimas 20 temporadas que San Francisco permite cinco series seguidas de touchdown al inicio de un partido. Y el equipo simplemente no tuvo respuesta a la capacidad de Mahomes de hacer jugada tras jugada.
En la revancha del próximo domingo en el Super Bowl en Miami, San Francisco deberá estar mejor equipado al menos para tratar de desacelerar el ataque de Mahomes.
Los 49ers agregaron un dinámico dúo de presión por los extremos antes de la temporada, adquiriendo a Dee Ford en un canje con los Chiefs y eligiendo a Nick Bosa en la segunda selección general. Eso ayudó al equipo a conceder la menor cantidad de yardas de la liga en una campaña desde los Jets de Nueva York de 2009.
“El contar con jugadores de presión por los costados acelera el proceso del quarterback, y no es que él necesite acelerar, sino que de antemano se deshace del balón con mucha rapidez. Pero eso cambia la dinámica del partido”, destacó Saleh. “Cierra la línea ofensiva, lo que crea un poco más de espacio y brinda a los jugadores internos mayor espacio para operar. El contar con esos chicos ahí, el tenerlos a toda velocidad, sin duda es de gran ayuda”.
Bosa y Ford transformaron la defensiva por completo al agregar la presión que ayudó a San Francisco a generar más pérdidas de balones del rival después de registrar apenas siete, la menor cantidad histórica, en 2018.