49ers esperan a Packers distintos en final de la Nacional
SANTA CLARA, California, EE.UU. (AP) — Aaron Rodgers había tenido la actuación menos productiva como titular en su carrera. Al concluir el encuentro, felicitó a Jimmy Garoppolo, el quarterback rival, y le transmitió un mensaje sencillo.
“Nos veremos después”, advirtió el mariscal de campo de los Packers.
Menos de dos meses después de aquel encuentro desigual, las palabras de Rodgers han resultado proféticas. Por octava vez en las últimas 25 temporadas, Green Bay y los 49ers de San Francisco se enfrentarán en la postemporada, esta vez por un boleto al Super Bowl.
“Sabemos que éste será diferente”, reconoció el entrenador de los 49ers, Kyle Shanahan. “Aquel partido se les escapó muy pronto. Definitivamente ése no será el equipo al que veremos esta semana. Todos saben lo bueno que es Green Bay, lo bueno que es su personal de entrenadores, lo buenos que son sus jugadores, incluido su quarterback... Aquel partido tiene realmente relevancia cero en lo que va a ocurrir este domingo”.
Los Packers (14-3) no lucieron el 24 de noviembre como un equipo candidato al Super Bowl. Fueron anulados totalmente por los 49ers (14-3) desde el inicio.
Fred Warner capturó a Rodgers, quien soltó el balón en la primera serie ofensiva. Nick Bosa tomó el balón y lo condujo a la yarda 2, lo que dejó servida la mesa para un acarreo de anotación de Tevin Coleman.
Los Niners añadieron un par de goles de campo y frenaron a Aaron Jones en cuarto down, antes de dejar el duelo prácticamente definido al final de la primera mitad, con un pase de anotación de 42 yardas, de Garoppolo a Deebo Samuel, y con un tercer gol de campo de Chase McLaughlin en los últimos 65 segundos del segundo cuarto.
Así, se colocaron arriba por 23-0.
Rodgers lanzó un pase de touchdown a Davante Adams en el tercer cuarto, sólo para que los Niners respondieran dos jugadas después, en un envío de 61 yardas a George Kittle. La paliza estaba en marcha.
El resultado final de 37-8 representó la segunda derrota más abultada sufrida por Rodgers en su carrera durante un encuentro en que no se hubiera lesionado.
“Me gustaría pensar que hemos mejorado durante el transcurso de la temporada, especialmente en las últimas seis semanas o algo así”, dijo el entrenador Matt LaFleur el lunes. “Ciertamente, no pienso que hayamos dado nuestro mejor partido ese día. Hay que darles mucho mérito. Hay probablemente una razón de eso. Se trata de un equipo realmente talentoso, lo sabemos. Pero a fin de competir con ellos y de tener una oportunidad de vencerlos, vamos a tener que jugar en nuestro mejor nivel”.
Rodgers finalizó el partido completando 20 de 33 envíos para 104 yardas. Registró su estadística más baja de por vida, con sólo 3,15 yardas por intento.
Fue capturado cinco veces para una pérdida de 38 yardas. El tackle derecho Bryan Bulaga se marchó en el comienzo del primer cuarto por una lesión de rodilla.
Las 1,9 yardas netas por jugada de pase fueron el menor número de los Packers desde 1991, un año antes de que llegara Brett Favre.
“Obviamente tenemos que jugar mucho mejor”, dijo Rodgers. “Ellos son un gran equipo, con una gran línea. Evidentemente presionan al pasador y no necesitan a muchos jugadores para hacerlo. Ejercen una excelente presión contra el pase. Son realmente buenos atrás, inteligentes”.
Los Packers no han perdido desde entonces. Ganaron los últimos cinco encuentros de la campaña regular y el domingo triunfaron por 28-23 sobre Seattle, para dejar lista la revancha. San Francisco derrotó a Minnesota por 27-10 el sábado.
