La huelga contra las pensiones paraliza el tráfico parisino
PARÍS (AP) — Los parisinos tuvieron que lidiar con enormes embotellamientos viales para acudir a trabajar el lunes, luego de que las huelgas contra los cambios a los planes de pensiones paralizaron el transporte público por quinto día consecutivo y se avizora que la situación empeore.
El presidente Emmanuel Macron se preparó para una de las semanas más complicadas de su presidencia mientras su gobierno se alista a rediseñar el intrincado sistema de pensiones. Macron pretende unir 42 planes de retiro distintos en uno solo para crear un sistema más equitativo y financieramente sustentable. Los sindicatos consideran que la medida es un ataque al estilo de vida francés a pesar de que no se prevé que el gobierno cambie la edad requerida actualmente para jubilarse, de 62 años.
Citando riesgos a la seguridad, la red ferroviaria nacional SNCF advirtió a los viajeros el lunes que permanecieran en casa o utilizaran “medios alternativos de locomoción”, en lugar de atestar los andenes con la esperanza de abordar uno de los pocos trenes disponibles en operación.
La autoridad nacional de caminos reportó más de 600 kilómetros (360 millas) de problemas de tránsito durante la hora pico en la región de París, un incremento respecto a los 150 kilómetros (90 millas) en un día promedio.
La policía parisina se prepara para una enorme manifestación contra el plan de pensiones el martes, similar a la que se registró el jueves pasado en la que participaron más de 800.000 personas en todo el país. Temiendo posibles actos de violencia, las autoridades advirtieron de la movilización de importantes recursos para frenar la violencia. Se ordenó el cierre de todos los restaurantes y comercios en el trayecto de la protesta, informó la policía.
Air France, la aerolínea nacional, dijo que más del 25% de sus vuelos locales serán cancelados el martes debido a la huelga, así como el 10% de sus vuelos de recorrido intermedio. Los trayectos de larga distancia no resultarán afectados. Señaló que la autoridad de aviación civil de Francia solicitó a todas las aerolíneas reducir el 20% de sus vuelos el martes en seis aeropuertos, incluyendo París, Burdeos y Marsella.