Estudiante de Yale lucha para que no deporten a su madre
NUEVA YORK (AP) — Un estudiante de postgrado de la Universidad de Yale pasa el día pendiente de su teléfono a la espera de noticias sobre su madre, quien está detenida y podría ser deportada a Honduras, un país donde él asegura que no recibirá el tratamiento médico que necesita tras haber sufrido un cáncer avanzado.
Cristian Padilla Romero, un estudiante de doctorado de 24 años, creó una petición en internet para que los Servicios de Inmigración y Control de Aduanas liberen a su madre. Ha recaudado más de 39.000 dólares a través de un portal de internet para cubrir los gastos médicos y su defensa legal.
Su madre, Tania Romero, está detenida en un centro de detención de Georgia desde mediados de agosto.
“No está bien”, dijo Padilla Romero. “Estamos pidiendo que la liberen para que pueda ver a un médico”.
Un portavoz de la agencia migratoria, más conocida como ICE, dijo que debido a políticas de privacidad la agencia no comentaría sobre el caso.
El hondureño asegura que el domingo por la noche agentes migratorios se llevaron a Padilla Romero a un aeropuerto, pero que después la devolvieron al Centro de Detención del condado de Irwin, en Ocilla, Georgia. Esto no pudo ser confirmado con ICE.
Padilla Romero, un estudiante de historia de Latinoamérica, vive, además, un futuro incierto: se encuentra ilegalmente en el país, sólo protegido por un programa de alivio migratorio temporal conocido como DACA. El programa, que ayuda a jóvenes inmigrantes, podría ser eliminado por el gobierno de Donald Trump. El martes la Corte Suprema escuchó argumentos a favor y en contra del programa ya que varias cortes federales en el país fallaron a favor de preservarlo.
Estudiantes y profesores de Yale han expresado su apoyo a Padilla Romero contactando a miembros del Congreso, a organizaciones de ayuda y escribiendo comunicados. Lynn Cooley, directora de la Facultad de Postgrado de Artes y Ciencias de Yale, escribió una columna en el diario Atlanta Journal-Constitution en la que dijo que enviar a Romero a Honduras, donde no contará con el cuidado médico que necesita, sería “inhumano”.
“La familia Romero nos recuerda que este es un país construido a base del trabajo duro y las habilidades intelectuales de los inmigrantes”, escribió Cooley. “No deberíamos bloquear acceso a los recursos que hacen mejores a los inmigrantes y a todos nosotros”.
Padilla Romero dijo que viajó a Washington el miércoles para hablar del caso de su madre con personal de la oficina de los senadores de Connecticut Chris Murphy y Richard Blumental. La Universidad de Yale se encuentra en New Haven, Connecticut.
La petición de internet del hondureño cuenta con más de 37.000 firmas.
El estudiante también dijo que ha estado en contacto con la oficina de la congresista de Georgia Lucy McBath, aunque ésta no lo confirmó con Associated Press.
Romero, de 48 años, llegó a Estados Unidos en la década de 1990 y vivió en Orlando (Florida), y Atlanta. Trabajó en limpieza, lavando platos en restaurantes, y en la construcción para mantener a tres hijas y a Padilla Romero. En agosto, agentes de la policía la pararon por exceso de velocidad cerca de Atlanta. Romero no llevaba licencia de conducir. La policía llamó a ICE.
El estudiante asegura que ICE emitió una orden de deportación contra Romero en el 2008 porque ésta no se había presentado a citas en las cortes de inmigración. Sin embargo, explicó que su madre no se presentaba a las citas porque nunca recibió las citaciones para la corte. El estudiante dijo que solicitó, amparándose en la ley de libertad de información, pruebas de que las citaciones no llegaron a su casa y obtuvo documentos que efectivamente decían que las citaciones no habían llegado a casa de Romero y que habían sido devueltas al remitente.
En el 2016 Romero fue diagnosticada con cáncer oral avanzado.
Tras su detención, una abogada solicitó una suspensión de la orden de deportación contra la hondureña, basada en la frágil salud de Romero. El estudiante dice que ICE la denegó. La abogada también solicitó que se reabra su caso. La solicitud fue denegada en octubre por una corte de inmigración en Atlanta. La familia Romero está ahora apelando esa decisión a la Junta de Apelaciones de Inmigración.
Padilla Romero llegó a Estados Unidos a los siete años tras cruzar la frontera con parientes, explicó. A través de becas, accedió a la Universidad de Pomona, en el sur de California, y se graduó en el 2018.
Ahora, en Yale, se ha dado una pausa en sus estudios para concentrarse en su madre.
“Mis profesores han sido muy comprensivos”, dijo. “Tengo esperanza porque sé que tenemos mucho apoyo”.