Asprilla afirma que sujeto le ofreció matar a Chilavert
BOGOTÁ (AP) — Faustino Asprilla, exastro de la selección colombiana, afirmó que un sujeto vinculado con el narcotráfico le pidió “autorización” en abril de 1997 para asesinar a José Luis Chilavert, quien entonces brillaba como arquero de Paraguay, a raíz de un altercado entre los dos futbolistas.
Un partido disputado en aquellas fechas, por las eliminatorias al Mundial de Francia, se caracterizó por las fricciones. La más grave fue protagonizada por el atacante colombiano y el portero guaraní, expulsados por el árbitro brasileño Wilson Souza cuando restaban siete minutos del duelo que Paraguay ganó por 2-1.
Asprilla propinó un pisotón al paraguayo Celso Ayala, luego que Chilavert le atajó un disparo. El guardameta increpó al delantero colombiano, quien le propinó una bofetada.
Acto seguido, Chilavert lo escupió. De camino al vestuario, el guardameta pasó por el banco de Colombia y le propinó dos puñetazos a Asprilla.
Lo que habría ocurrido después de esa riña y de que los futbolistas se marcharon del estadio Defensores del Chaco en Asunción fue relatado por Asprilla en una entrevista con el canal regional Telepacífico de Cali, que comenzó a transmitir un documental sobre la vida del exjugador con motivo de sus 50 años.
“Me entra una llamada y alguien me dice: ‘Soy Julio Fierro... ¿podés llegar acá a mi hotel?”, contó Asprilla, quien dijo que acudió efectivamente a esa cita pactada tras el partido, junto con Víctor Hugo Aristizábal, otro miembro de la selección.
Julio César Correa Valdés, alias “Julio Fierro”, fue considerado uno de los principales colaboradores del capo narcotraficante Pablo Escobar.
“Fui con Aristizábal y nos dijeron: ‘Necesitamos que ustedes den autorización porque estos dos manes se van a quedar aquí en Asunción, porque quieren ir a matar a ese gordo Chilavert‘”, recordó Asprilla.
Añadió que él mismo había rechazado la oferta.
"Pero ustedes están locos... ¿Cómo van a acabar con el fútbol colombiano? Eso no puede ser. No, no, no", dijo haberle respondido a Julio Fierro, quien desapareció en 2001. Años después, la fiscalía confirmó que el criminal fue asesinado en Medellín y el cadáver cremado en una finca de la población de Caldas, a las afueras de esa ciudad en medio de venganzas entre narcotraficantes.
Consultada por The Associated Press, la Fiscalía indicó el martes que no recibió ninguna denuncia al respecto y que lo afirmado por Asprilla no se conoció en su momento.
Chilavert, normalmente muy activo en su cuenta de Twitter, no se pronunció sobre el relato de Asprilla. Se limitó a retuitear una nota informativa sobre las declaraciones del exfutbolista, quien se destacó con sus goles y actuación con Colombia en los mundiales de 1994 y 1998, y quien militó también en el Parma de Italia y el Newcastle de Inglaterra.