Análisis AP: Anuncio de Bloomberg sacude a los demócratas
BLUFFTON, Carolina del Sur, EE.UU. (AP) — No todo va bien en la búsqueda del Partido Demócrata de su candidato a la presidencia: sólo hay que preguntarle a Michael Bloomberg.
El multimillonario de Nueva York _cuya carrera en los negocios y la política ha sido dirigida más que nada por los datos y el análisis_ está dando pasos para participar en la contienda demócrata por cuenta propia, cuando faltan menos de 90 días para que se realice la primera votación.
Más que nada, su decisión refleja dos factores primordiales: la evidente debilidad de Joe Biden, el favorito de la clase dirigente, y los persistentes temores de que su rival emergente Elizabeth Warren sea vista por el electorado como demasiado liberal para derrotar al presidente Donald Trump en una elección presidencial.
Es difícil determinar si Bloomberg, un exrepublicano sin una amplia base política, podrá competir contra Biden o Warren en caso de decidirse a contender, pero su paso hacia esa dirección representa una fuerte crítica a la lucha por la silla presidencial de su nuevo partido.
"Este es un equipo que es muy inteligente y metódico", dijo Jef Pollock, un encuestador demócrata con sede en Nueva York. "Refleja una sensación de que los actuales contendientes no pueden vencer a Donald Trump y por ello sienten que ellos deben intentarlo".
Hace apenas siete meses, Bloomberg había anunciado que no participaría en las elecciones primarias demócratas luego de una breve fase de exploración. En ese entonces, sus asesores compartieron en privado sus análisis de que no había espacio suficiente para otro centrista como Bloomberg teniendo a Biden en la contienda.
Vaya diferencia la que representan siete meses.
El exvicepresidente Biden ha dado señales de vulnerabilidad en los primeros días de su campaña a través de una serie de metidas de pata y actuaciones incongruentes que preocuparon a sus aliados de la clase dirigente. Aun así, Biden se mantuvo al frente en casi todas las encuestas durante la mayor parte del año debido a la persistente creencia de que él era el demócrata más adecuado para un duelo frente a frente con Trump.
Un punto de inflexión ocurrió el mes pasado, cuando Biden dio a conocer un débil reporte de recaudación de fondos del tercer trimestre del año, que evidenció la debilidad de su presunta fuerza y generó serias dudas sobre el alcance de su apoyo de parte de los miembros más poderosos del partido. En las últimas semanas, una serie de encuestas decepcionantes en Iowa y Nueva Hampshire indicaron que Biden se está hundiendo en los estados que típicamente importan más en las elecciones primarias.
Biden se está moviendo claramente hacia la dirección incorrecta y aumenta el número de demócratas preocupados.
Entre ellos hay aliados del establishment, como el exgobernador de Virginia Terry McAuliffe, quien el mes pasado alentó a Biden a despedir a asesores y dejar de volar en aviones privados. Incluyen a votantes de las bases, como Bobbi Helton, una jubilada de Hilton Head, Carolina del Sur, quien esta semana dijo que todavía busca a un candidato moderado.
"Siempre pensé que Biden era maravilloso", dijo esta semana en un evento de otro candidato. "Pero viendo los debates está un paso en cuanto a sus ideas. Si va a debatir con Trump, Trump lo va a arrasar".
Entre los preocupados está el propio Bloomberg, de 77 años, un casi eterno candidato que además es uno de los hombres más ricos del mundo. Ya dio algunos pasos para calificar para la contienda primaria presidencial en Alabama, el estado con el primer plazo de registro.
Eso no asegura que lance formalmente una campaña, pero sin duda deja la puerta abierta.
En caso de que quede alguna duda de qué motiva su decisión, su principal asistente político Howard Wolfson explicó la ideología de Bloomberg la tarde del jueves cuando el mundo político trataba de entender el significado de la impactante decisión de su jefe de acercarse al proceso de postulación.
"Ahora debemos acabar el trabajo y asegurarnos de que Trump sea derrotado", dijo Wolfson, "pero Mike cada vez está más preocupado de que el actual campo de candidatos no está bien posicionado para hacerlo".
Claro está, la débil precandidatura de Biden es apenas una pieza. Los otros precandidatos principales tienen evidentes debilidades que también han profundizado la ansiedad entre los demócratas.
Bernie Sanders tiene 78 años, se describe como un socialista demócrata y se recupera de un ataque cardiaco. Pete Buttigieg es un alcalde de 37 años cuyo principal logro es liderar a una ciudad que cabe en un estadio de futbol americano. Adicionalmente, Warren, que ahora superó a Biden en Iowa y Nueva Hampshire, quiere eliminar el seguro de salud privado a favor de un plan respaldado por el gobierno que no logra explicar cómo financiaría.
Bloomberg está lejos de ser un guerrero ideológico. Él es un pragmático exalcalde de la ciudad de Nueva York que se unió formalmente al Partido Demócrata apenas en octubre de 2018. Hace unos meses, cuando recién exploraba postularse para 2020, aseguró que ninguno de sus críticos más liberales ha logrado tantos avances como él en los temas principales del momento: cambio climático, violencia con armas de fuego e inmigración.
En los tres temas, Bloomberg ha creado organizaciones a nivel nacional respaldadas con su vasta fortuna que han ayudado a implementar una serie de cambios progresivos en ciudades y estados del país. Dichos temas tienen repercusión particular en los suburbios, áreas que suelen inclinarse hacia los republicanos pero que se han alejado de ellos desde la elección de Trump.