Aumentan jóvenes de EEUU que vapean; les gusta sabor menta
Una investigación en Estados Unidos mostró que los adolescentes que vapean prefieren los cigarrillos electrónicos fabricados por Juul Labs y que muchos prefieren el sabor a menta. Eso indica un cambio después de que la empresa dejó de vender los sabores más dulces.
Los resultados son parte de dos estudios publicados el martes en la versión digital de la revista Journal of the American Medical Association. Estos incluyen un informe del gobierno estadounidense basado en un sondeo que indica que la epidemia de vapeo entre los adolescentes en Estados Unidos no muestra señales de disminuir.
Según los cálculos, un 28% de los estudiantes de los últimos cuatro años de secundaria y un 11% de los de los primeros dos años utilizó vaporizadores en el mes previo, según el reporte, que se basa en una encuesta realizada este año. Eso representa 5,3 millones de usuarios jóvenes, comparado con 3,6 millones del año pasado, a pesar de la ley federal que prohíbe la venta a menores de 18 años.
Los resultados se publican tras un llamado del gobierno en septiembre de prohibir prácticamente todos los sabores para vapear.
El reporte del gobierno, que se basó en una encuesta a casi 20.000 jóvenes, encontró además que Juul es la marca preferida de 60% de los consumidores de cigarrillos electrónicos que asisten a la escuela secundaria. La mayoría de ellos usaron cigarrillos de sabores y entre éstos, casi 60% prefirieron menta o mentol.
Un estudio separado conducido por la Universidad del Sur de California indica que el mentol no tiene el mismo atractivo que la menta. El estudio concluyó que la menta fue el sabor más popular entre los usuarios de Juul entre 10mo y 12do grados y que fue el segundo más popular entre los más jóvenes. En contraste, menos de 6% de los adolescentes prefirieron mentol. El estudio se basó en un sondeo nacional diferente que incluyó a 1.800 usuarios de Juul.
Los resultados son preocupantes, aunque no sorprendentes, dijo Thomas Ylioja, un experto en tabaquismo en el hospital National Jewish Health en Denver.
"Tenemos toda una generación de jóvenes adictos a esos productos”, dijo Ylioja, que no participó en los estudios. "En lugar de dejar de vapear cuando no pueden conseguir un sabor particular, cambian a otro que está más disponible”.
Ambos estudios fueron publicados en la revista Journal of the American Medical Association.