Carlos Carrasco gana el premio Roberto Clemente
CLEVELAND (AP) — Carlos Carrasco no permitió que el cáncer le impidiera ayudar a otros, lo inspiró a hacer más.
El lanzador venezolano de los Indios de Cleveland, al que diagnosticaron en mayo una forma tratable de leucemia, ganó el premio Roberto Clemente 2019.
Las Grandes Ligas otorga cada año el galardón en reconocimiento a la personalidad ejemplar, participación comunitaria y aportaciones positivas de un jugador.
A pesar de que Carrasco ha estado enfermo y se perdió buena parte de esta campaña, su actitud positiva nunca flaqueó y sus esfuerzos tampoco han menguado.
El jugador de 32 años visita con frecuencia a niños que luchan contra la enfermedad en hospitales de Cleveland, mientras recibía el tratamiento médico contra su propia enfermedad.
“Es algo que me encanta hacer, ayudar a bastantes chicos y familias”, declaró Carrasco, que tiene cinco hijos.
Todos los 30 equipos de la MLB recomendaron a un jugador para que fuera candidato al premio Clemente. Carrasco fue elegido por un panel que incluyó al comisionado Rob Manfred, la viuda de Clemente, Vera, y miembros de la prensa.
Carrasco recibió el galardón la noche del viernes, previo al tercer juego de la Serie Mundial en Washington.
El sábado, el lanzador estará en el diamante en el cuarto partido del Clásico de Otoño para participar en la campaña del béisbol "Stand Up To Cancer" (Lucha contra el Cáncer), igual que cuando asistió a un homenaje en el Juego de Estrellas disputado en julio en Cleveland.
Carrasco es el tercer jugador de los Indios que gana el premio después de Jim Thome (2002), miembro del Salón de la Fama, y Andre Thornton (1979).
Desde 1971, la MLB ha distinguido a jugadores por sus acciones de filantropía. El galardón lleva el nombre del puertorriqueño Roberto Clemente, que participó en 15 Juegos de Estrellas y murió en un accidente aeronáutico el 31 de diciembre de 1972 cuando llevaba materiales de asistencia para entregarla a víctimas de un sismo en Nicaragua.
Carrasco dijo que lo inspiró el legado de Clemente.
“Cuando leo su historia”, dijo Carrasco, “me digo ‘quiero ser como él’, porque es la manera que amo ayudar a la comunidad, es la manera como soy y son los pasos que quiero seguir”.
En el último año, Carrasco y su esposa, Karry, han entregado almuerzos a personas sin techo en Tampa, Florida. Han donado becas a madres solteras y viajado a África para obsequiar zapatos, camisas y mochilas a niños.
Sin embargo, el empeño más apasionado de Carrasco ha sido ayudar a personas en su natal Venezuela. Ha donado juguetes durante la Navidad y dinero para la compra de alimentos y suministros médicos en un país inmerso en una crisis política que ha derivado en un éxodo de millones de personas.
No obstante, ha sido en Cleveland donde las acciones del popular serpentinero derecho han tenido repercusiones positivas igualmente importantes.
Carrasco, transferido a Cleveland desde Filadelfia en 2009, comenzó a visitar hospitales en 2014. Al cabo de una visita dijo que una de sus hijas se cortó algo de cabello y le dijo “dáselo a los niños”.
Este hecho conmovió a Carrasco y lo alentó a ayudar en cualquier forma como le fuera posible.
“Mi esposa me miraba y casi comenzamos a llorar”, afirmó. “Todo comenzó aquí”.
Carrasco deseó no tener que luchar contra el cáncer como lo están haciendo esos chicos. Sufrió fatiga durante meses hasta que se determinó mediante exámenes que padecía leucemia mieloide crónica, un cáncer de la sangre y la médula ósea.
Carrasco se vio obligado a dejar el béisbol para enfrentar una enfermedad posiblemente mortal. Carrasco es animado por sus compañeros y lo revitalizan sus visitas a hospitales.
“Les digo a todos los chicos, adolescentes y familias ahí, si yo puedo hacerlo, ellos también”, apuntó. “Así que jamás se rindan y manténganse fuertes”.
Carrasco tenía la determinación de lanzar de nuevo esta campaña. Regresó al relevo después de una ausencia de más de tres meses el 3 de septiembre en Tampa, donde tiene una casa para pasar el receso de la campaña.
Dijo sentirse “fabuloso” y que corre y efectúa lanzamientos con el objetivo de estar listo para la pretemporada.
Aunque Carrasco confía en ayudar a los Indios en el montículo quiere dejar un legado fuera del campo.
“La manera como quiero que la gente me recuerde es como un gran ser humano, una gran persona, un gran jugador también”, afirmó. “Eso es más importante. No seré eterno en el béisbol”.