Scherzer busca dejar atrás tropiezos recientes en playoffs
WASHINGTON (AP) — Con base en lo que todos dicen acerca de Max Scherzer, parecería obvio que los Nacionales de Washington recurran a él como abridor del Juego de Comodines de la Liga Nacional, previsto para este martes ante los Cerveceros de Milwaukee.
Scherzer “irá probablemente al Salón de la Fama”, recalcó el manager de los Cerveceros Craig Counsell.
Brandon Woodruff, la opción de Counsell para abrir por Milwaukee como visitante, estaba ansioso por conocer a Scherzer durante el Juego de Estrellas. Admira al as, tres veces galardonado con el Cy Young, al considerar que tiene “un tipo de fuego interior” muy especial.
“Somos afortunados por tener a Max Scherzer lanzando en el Juego de Comodines”, dijo el manager de los Nacionales, Dave Martínez.
¿Estaba tan clara esa decisión? El piloto boricua pudo haber recurrido a Stephen Strasburg, quien a diferencia de Scherzer estuvo saludable todo el año y logró algunos de los mejores números de su carrera.
Strasburg y Patrick Corbin estarán listos en el bullpen para colaborar en caso de emergencia.
Pero hay también algo que salta a la vista, las estadísticas de Scherzer en postemporada.
En esta época, parece inadecuado mencionar siquiera el número de triunfos y derrotas cuando se habla de los pitchers. Scherzer tuvo en la campaña un récord de 11-7 y una efectividad de 2.92 en 27 aperturas.
Pero los equipos en los que ha militado Scherzer _los Nacionales y los Tigres de Detroit_ no han tenido mucho éxito con él en el montículo durante juegos recientes de playoffs.
Desde una victoria con Detroit ante Oakland en la serie divisional de 2013, Scherzer ha cumplido con siete apariciones en playoffs, ya sea como abridor o relevista. En esas actuaciones, sus equipos tienen un récord de 0-7.
Y en dichos encuentros, la foja de Scherzer es de 0-4. Así, su marca de por vida en postemporada se ha demeritado de 4-1 a 4-5.
“La temporada depende de esto. He lanzado antes en estas situaciones, y el béisbol enloquece. La intensidad es inconcebible”, dijo Scherzer, quien sufrió la derrota en el fiasco más reciente de Washington en octubre, durante el quinto inning de una derrota ante los Cachorros de Chicago, en el encuentro definitivo de la serie divisional de 2017. “Y hay que salir, dar lo mejor de uno y competir con todo”.
Los Nacionales tienen un registro de 0-3 en duelos de vida o muerte, todos como locales. Jamás han ganado una serie, en cuatro viajes anteriores a los playoffs durante los últimos ocho años.
En contraste, los Cerveceros llegaron al séptimo juego de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional hace apenas un año.
Hay otra disparidad entre los rivales en un juego que determinará quién avanza a la serie divisional para enfrentar a los Dodgers de Los Ángeles a partir del jueves: La forma en que tratan de sacar los 27 outs.
“Somos diferentes, y creo que los equipos de playoffs deben serlo”, dijo Counsell. “Pienso que eso es bueno”.
Los Nacionales se basan en su rotación, encabezada por Scherzer, Strasburg y Corbin, ubicados entre los 10 mejores de la Liga Nacional en carreras limpias, ponches y promedio que permiten a los bateadores. En tanto, la efectividad colectiva de su bullpen fue la peor de las mayores en esta campaña.
Y ésa es una de las razones por las que Martínez advierte que Strasburg y Corbin estarán disponibles como relevistas.
Milwaukee, en contraste, encabeza la tendencia en las mayores, de cambiar a menudo al lanzador.
“Para mí, creo que el juego de mañana lo trataré como cualquiera otra apertura, donde mi meta es finalizar el juego”, dijo Woodruff.