A dos años de María, recuperación de Puerto Rico es lenta
SAN JUAN (AP) — Apagones cada semana. Cientos de aludes sin limpiar. Más de 25.000 casas con lonas azules en lugar de techos.
La recuperación tras los estragos dejados por el huracán María ha sido lenta, y Puerto Rico recordó el viernes a quienes murieron hace dos años. La tormenta categoría 4 mató a aproximadamente 2.975 personas tras su paso y causó un estimado de 100.000 millones de dólares en daños. Fue la tormenta más fuerte en golpear el territorio estadounidense en casi un siglo, y provocó el éxodo de casi 160.000 personas a Estados Unidos continental.
Millones de dólares en fondos federales que las autoridades locales dicen que necesitan para reparar vialidades, construir casas nuevas y mejorar la inestable red eléctrica de la isla no han sido entregados, lo que complica la recuperación de Puerto Rico mientras intenta además salir de una recesión que ya lleva 13 años. Las autoridades dicen que la isla no está preparada del todo para soportar otro golpe directo esta temporada de huracanes, y señalaron que este mes los huracanes Dorian y Jerry pasaron apenas al noreste de Puerto Rico.
Aunque el Congreso de Estados Unidos asignó casi 43.000 millones de dólares en fondos federales a Puerto Rico para labores de recuperación, sólo se han entregado 13.000 millones de dólares de los 21.000 millones de dólares comprometidos por el gobierno de Estados Unidos, dijo a The Associated Press Ottmar Chávez, director ejecutivo de la Oficina Central de Recuperación y Reconstrucción.
“Ciertamente todavía tenemos mucha necesidad, y todavía queda trabajo por hacer”, dijo.
El estado de la red eléctrica sigue siendo una de las principales preocupaciones para los puertorriqueños, ya que la reconstrucción ni siquiera ha comenzado.
“Es un proyecto que tardará siete años o más”, dijo el viernes a la AP José Sepúlveda, ingeniero de transmisión y distribución de la Autoridad de Energía Eléctrica de Puerto Rico.
Agregó que las líneas de transmisión se repararon y ya pueden soportar vientos de 225 km/h (140 mph), pero las líneas de distribución, que quintuplican en cantidad a las de transmisión, probablemente no sobrevivan una tormenta categoría 2. Sepúlveda dijo también que los trabajadores aún no empiezan a enterrar los cables que se conectan a infraestructura crítica, como hospitales, ni a reubicar subestaciones en áreas que tienden a inundarse.
La compañía eléctrica requiere 8.000 millones de dólares en fondos de recuperación del huracán para los próximos proyectos, dijo Sepúlveda, y agregó que toma tiempo que la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias de Estados Unidos (FEMA) revise esos proyectos.
Los críticos dicen que el gobierno puertorriqueño también ha demorado demasiado y lo acusan de burocrático tras una reciente crisis política durante la cual tuvo tres gobernadores en menos de una semana. También persisten las preocupaciones por la corrupción. Las autoridades federales arrestaron la semana pasada a una exadministradora de alto nivel de la FEMA y al ex director general de una compañía que obtuvo 1.800 millones de dólares en contratos federales para reparar la red eléctrica de la isla tras el paso de María.
Las demoras en la recuperación se sienten con más intensidad en las áreas rurales y empobrecidas de la isla, incluido el barrio Las Monjas en la capital de San Juan, en donde todavía hay un par de techos azules.
“Los mismos dueños han tenido que hacer los préstamos, porque esperando por FEMA se muere todo el mundo”, dijo Ivette Henríquez, un ama de casa de 65 años que también está molesta porque el alumbrado de la calle en la que vive no ha sido reparado desde María.
Dave Bibo, administrador adjunto de la FEMA para respuesta y recuperación, le dijo a la AP que la agencia tiene seis veces más inventario en bodegas en Puerto Rico que lo que tenía antes de María, y que más de 2.000 empleados de la FEMA permanecen en la isla.
“No hay duda de que la respuesta y recuperación de María ha sido de las misiones más desafiantes en la historia de la FEMA, pero confiamos en que apoyaremos a la gobernadora para reconstruir Puerto Rico para que sea más fuerte y resistente”, dijo.