Alcalde de Río pide censurar libro con contenido gay
RÍO DE JANEIRO (AP) — Al alcalde de Río de Janeiro, Marcelo Crivella, un expastor evangélico, el tiro le salió por la culata.
Crivella ordenó a los organizadores de la Bienal del Libro, uno de los principales festivales literarios de Brasil, que retiraran de circulación un libro de cómics de la editorial Marvel que contiene un beso entre dos hombres para “proteger” a los menores de “contenido sexual”. Horas después, y tras la negativa de los organizadores, el libro se agotó.
“La alcaldía determinó que los organizadores recojan ese libro que trae contenido sexual para menores”, había dicho Crivella el jueves en un video publicado en su cuenta de Twitter.
El libro, llamado “Vengadores, la cruzada de los niños”, presenta una escena en la que dos personajes hombres, novios en la historia, se besan.
“Libros así necesitan estar embalados en plástico negro lacrado. Necesitamos proteger a nuestros niños. No es correcto que tengan acceso precoz a asuntos que no están de acuerdo con sus edades”, dijo el alcalde.
La Bienal no dio su brazo a torcer. En un comunicado defendiendo la exhibición del libro, los organizadores destacaron que se trata de un evento “plural, donde todos están representados”.
“Es un festival que da voz a todos los públicos, sin distinción, como debe ser en una democracia. Si un visitante adquirió el libro y no le agrada, tiene el derecho a solicitar el cambio del producto”, resaltó la organización en un comunicado enviado a The Associated Press.
Descontento con la decisión de la Bienal, la alcaldía realizaba el viernes una inspección del predio donde se realiza el festival para identificar otros posibles libros considerados “impropios” por su contenido.
Según dijo la asesoría de comunicación de la alcaldía a The Associated Press, fiscales oficiales buscan adecuar el contenido expuesto con el “Estatuto del Niño y el Adolescente”, que en uno de sus artículos dice que revistas y publicaciones que contienen material “impropio o inadecuado” deben ser comercializadas con un envoltorio lacrado. El artículo no especifica qué tipo de contenido.
En una nota oficial, la alcaldía advirtió que en caso de incumplimiento el material puede ser confiscado y el evento podría ver cancelada su licencia para funcionar.
La comisión de Derechos del Niño y del Adolescente de la Organización de Abogados de Brasil (OAB) de Río manifestó que la alcaldía no tiene potestad para confiscar libros y que es apenas atribución de la justicia.
La decisión de Crivella generó enorme repercusión en las redes sociales, donde muchos se mofaron de la “publicidad” gratuita prestada por el alcalde al libro, mientras otros resaltaron que la homofobia fue recientemente criminalizada en Brasil con penas de hasta cinco años de prisión.
“Cualquier tipo de censura es inconstitucional, estamos en un país laico donde la religión no debe mezclarse con el estado”, dijo a AP Toni Reis, presidente de la Alianza Nacional LGBTI+, una de las mayores organizaciones brasileñas que defiende los reclamos de la comunidad homosexual y transgénero.
El pedido de censura de Crivella aparece en sintonía con el marcado intento de las autoridades de la mayor nación de Latinoamérica de desplegar una agenda conservadora, acentuado luego de la llegada a la presidencia de Jair Bolsonaro en enero.
Esta semana, el gobernador de Sao Paulo, el derechista Joao Doria, adhirió al discurso del presidente Bolsonaro al manifestarse en contra de una enseñanza que contemple la diversidad sexual.
Doria ordenó retirar de circulación un libro didáctico de la red de educación pública que distinguía el sexo biológico de la identidad de género, contemplando términos como “transgénero” y “bisexual”.
De fuerte tradición conservadora, Crivella, quien fue obispo de la Iglesia Universal del Reino de Dios en Brasil, se ha referido en el pasado a los homosexuales como “víctimas de un terrible mal”.
“Es un precedente muy grave que no debemos aceptar. La homosexualidad existe desde que el mundo es mundo. El alcalde no va a acabar con nuestra comunidad”, opinó Reis.
Además, el alcalde no ha ocultado su desinterés por el mundialmente famoso carnaval de Río, uno de los principales eventos de la ciudad que mueve cada año cientos de millones de dólares, en parte gracias a la afluencia de turistas. Crivella ha impulsado una reducción del dinero para subsidiar a las escuelas de samba y no se lo ha visto durante los días de desfile en el sambódromo, como es tradición entre las autoridades.