Nicaragua: jefe militar causa escándalo con denuncia a ONG
MANAGUA (AP) — Las revelaciones del máximo jefe del ejército de Nicaragua sobre un supuesto complot de “funcionarios de ONG” para crear una división en las fuerzas armadas y derrocar a Daniel Ortega fueron recibidas con críticas entre exmilitares y sectores de la oposición.
El general Julio Avilés dijo la noche del lunes que durante las protestas de 2018 “funcionarios de organismos no gubernamentales" hicieron “llamados a leales compañeros a abrir la posibilidad de darle un golpe de Estado al gobierno legítimamente constituido”.
Eso es algo “que jamás haremos”, advirtió durante el acto por el 40 aniversario de la fundación del ejército que estuvo presidido por Ortega y su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo.
Aunque no identificó a las ONG aludidas, dijo que “son los mismos que presionaban para que hiciéramos misiones que no son de nuestra competencia, ignorando o queriendo ignorar las leyes de la república, pretendiendo con nuestra salida provocar una guerra entre hermanos”.
Este ejército es “fuerte, sólido, acerado en mil batallas y altamente cohesionado… Jamás nos van a dividir”, insistió Avilés, que repartió medallas a jefes militares extranjeros, entre ellos el ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino, invitado a la ceremonia.
Recordó que durante la crisis que estalló en abril de 2018 con protestas sociales contra Ortega, los militares llamaron a la reflexión y prometieron mantenerse al margen del conflicto. Sin embargo, opositores acusaron al ejército de proveer armas de guerra a la policía y a los paramilitares que dispararon contra manifestantes civiles.
Según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), la violenta acción gubernamental para sofocar las protestas dejó al menos 325 muertos, más de 2.000 heridos, 770 detenidos y más de 60.000 exiliados. La oposición asegura que aún quedan unos 130 “presos políticos” en las cárceles del país.
El exmayor del ejército Roberto Samcam, exiliado en Guatemala, aseguró que el ejército proporcionó armas de largo alcance a los paramilitares en las llamadas "operaciones limpieza" contra los opositores.
"En la conformación del grupo paramilitar les entregaron fusiles M-16, que estaban bajo resguardo del ejército y eran remanentes de la guerra de los 80, lanzagranadas M-79, FAL y gran cantidad de AK-47”, dijo Samcam.
Agregó que "esas armas no regresaron a las bodegas de Xiloá (un depósito del ejército al suroeste de Managua) y se quedaron almacenadas en casas... parte de esas armas están en la casa de un hermano de Avilés".
Consultado por The Associated Press, Samcam dijo que el discurso de Avilés fue "una declaración de amor al régimen”.
"Avilés intenta demostrar fidelidad y lealtad a Ortega con un compromiso público y contundente, en retribución al holding empresarial que el Ejecutivo le ha transferido al ejército: empresas médicas provisionales, préstamos del Seguro Social para la construcción de viviendas y la construcción del nuevo hospital militar, entre otros beneficios".
Según Samcam, las ONG aludidas por el jefe militar podrían ser los organismos que más han cuestionado el rechazo del ejército de desarmar a los grupos paramilitares, cuya existencia está prohibida por la constitución.
Pero según Avilés, el ejército es víctima de una “campaña de presiones, calumnias y mentiras, así como agresiones a nuestra institución y nuestros familiares".
El periodista Carlos Fernando Chamorro acusó al jerarca militar de “alinear de forma incondicional al ejército a la orden del dictador Daniel Ortega en la peor crisis política del régimen”.
“El general Avilés está hipotecando su suerte para una segunda reelección en el cargo como jefe del ejército, en el que lleva 10 años”, al tiempo que ignora “los crímenes de paramilitares”, escribió vía Twitter Chamorro, exiliado en Costa Rica tras el allanamiento y clausura de sus medios de comunicación por el gobierno.
Por su parte, la exguerrillera y disidente sandinista Dora María Téllez opinó que lo de Avilés son “inventos”. “Después de más de un año de silencio se lava las manos y amenaza a quienes critican al ejército. Muy valiente con desarmados, pero muy calladito con los paramilitares”, afirmó.
Por su parte, el portal oficial El19 Digital destacó el agradecimiento que el general Avilés hizo en su discurso a Ortega y a Murillo, “por todo su respaldo para fortalecer nuestras capacidades”. “Presidente, cuente con esta institución para seguir en el camino de una Nicaragua con seguridad, estabilidad, desarrollo económico, prosperidad y en paz”, les dijo Avilés.
En respuesta, la vicepresidenta Murillo declaró que “uno siente un orgullo infinito cuando escucha esos mensajes del general Avilés”.