El FMI se reúne con el gobierno argentino y con opositores
BUENOS AIRES (AP) — El candidato opositor favorito para las elecciones presidenciales de octubre en Argentina responsabilizó al Fondo Monetario Internacional (FMI) por la crisis económica que atraviesa el país y exigió que el organismo adopte las medidas adecuadas para enfrentar la “catástrofe social” que atribuyó al programa acordado con el gobierno del conservador Mauricio Macri.
El kirhcnerista Alberto Fernández se pronunció en un comunicado luego de la reunión que mantuvo el lunes con una delegación del organismo que llegó al país para una revisión antes de hacer un nuevo desembolso que formaría parte del préstamo por 56.000 millones de dólares acordado en 2018.
“La situación macroeconómica de la Argentina se ha deteriorado significativamente. El préstamo recibido por el país y el conjunto de condicionalidades asociado al mismo no han generado ninguno de los resultados esperados”, comentó Fernández, quien el 11 de agosto obtuvo un amplio triunfo en las primarias sobre el conservador presidente Mauricio Macri, quien busca la reelección el 27 de octubre.
“La economía real no ha dejado de contraerse... La inflación no ha tenido una trayectoria descendente sostenida y el endeudamiento público no ha dejado de crecer”, detalló.
La victoria de Fernández --quien en la fórmula electoral está acompañado de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015)-- sacudió al mercado generando una depreciación del peso de más del 20% en un contexto de recesión económica y una inflación de 25,1% en los siete primeros meses del año, lo que se interpretó como una reacción negativa de los inversores ante el eventual regreso del populismo kirchnerista.
La situación derivó en la salida del ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, quien fue reemplazado por Hernán Lacunza.
En este contexto de máxima incertidumbre en los mercados, se ha vuelto vital que el FMI desembolse 5.000 millones de dólares. Una negativa acrecentaría las dudas sobre la capacidad del país sudamericano de cumplir con sus obligaciones de deuda.
“Quienes han generado esta crisis, el gobierno y el FMI, tienen la responsabilidad de poner fin y revertir la catástrofe social que hoy atraviesa a una porción cada vez mayor de la sociedad argentina. Para ello deberían arbitrar todos y cada uno de los medios y las políticas necesarias”, sostuvo Fernández.
Más temprano, la delegación del FMI, encabezada por Roberto Cardarelli, se reunió con funcionarios del Ministerio de Economía.
Al respecto, el organismo manifestó en un comunicado que “mantuvo reuniones de trabajo constructivas con las autoridades argentinas esta mañana para continuar analizando el balance de los acontecimientos recientes”.
Respecto al diálogo con Fernández, lo describió como “un intercambio productivo de opiniones”.
Argentina recibió en 2018 un préstamo del FMI inédito por más de 56.000 millones de dólares en medio de una crisis cambiaria y económica y se comprometió a aplicar políticas de ajuste para lograr el déficit cero este año.
Fernández ha criticado ese acuerdo y ha señalado que debido a los problemas económicos que sufre Argentina habrá que “sentarse a negociar” el cronograma de pagos de 2020 y 2021. Sin embargo, ha descartado que en caso de llegar a la presidencia declare un cese de pagos.
El ministro Lacunza, por su parte, afirmó luego de un encuentro el sábado con funcionarios del FMI que el gobierno ha cumplido “todo el acuerdo” y no habría motivos para que el organismo no entregue un nuevo desembolso.
En las primarias Fernández se impuso con 47,6% de los votos y más de 15 puntos porcentuales sobre Macri, situándose a los ojos de los mercados como favorito para la primera vuelta electoral.
Según analistas, los inversores temen que el regreso del kirchnerismo conlleve a una reinstalación de las políticas intervencionistas y los controles de cambio y precios, lo que ha sido descartado por Fernández.
La volatilidad cambiaria luego de las primarias se desaceleró en los últimos días tras un incipiente diálogo entre Macri y Fernández. El dólar cerró el lunes a 57 pesos por unidad respecto del viernes, cuando cotizó al mismo valor en el estatal Banco de la Nación Argentina.