Gobierno de Nicaragua da por concluido diálogo con oposición
MANAGUA (AP) — El gobierno de Nicaragua envió una carta al representante del papa Francisco y a la Organización de Estados Americanos en la que dio por concluido el proceso de diálogo con la oposición, dijo el jueves el nuncio apostólico en Managua.
Hasta ahora el gobierno no ha publicado el documento, pero en declaraciones a The Associated Press, el nuncio Waldemar Somertag indicó que recibió una carta firmada por el canciller Denis Moncada en la que la gestión de Daniel Ortega le comunicó al Vaticano que la negociación con la Alianza Cívica (AC), iniciada en febrero, “culminó con la ausencia definitiva de la otra parte".
En mayo los miembros de la AC abandonaron la mesa de diálogo con el objetivo de presionar al gobierno para que excarcele a más de 700 detenidos que la oposición consideraba “presos políticos” y que salieron de prisión finalmente el 11 de junio.
Somertag dijo tener conocimiento de que la misma carta fue enviada a la OEA. Tanto el nuncio como el representante de la OEA, Luis Rosadilla, sirvieron como testigos y acompañantes de las negociaciones desarrolladas entre febrero y mayo.
La carta oficial se habría emitido como respuesta al interés de la oposición de volver a la mesa de diálogo para, según dijeron, continuar discutiendo con el gobierno temas pendientes como la restauración de las libertades públicas y una reforma electoral para adelantar los comicios de 2021.
El equipo negociador de la AC, formado por empresarios y políticos, acudió la víspera a la sede de las conversaciones en un centro de negocios al sur de Managua pero el gobierno no se presentó.
El nuncio declinó compartir íntegramente el documento oficial, pero dijo que está fechado el 30 de julio y dirigido a la Santa Sede. Tampoco quiso responder si el papa Francisco podría abogar ante Ortega por un reinicio de las negociaciones, pero dijo que “la Santa Sede respalda la salida pacífica y negociada de cualquier conflicto. Los mensajes del Santo Padre junto con el cotidiano actuar de su representante en Nicaragua son claros que este tipo de salida es la única viable y necesaria para superar la crisis socio político del Nicaragua”, afirmó.
Consultado por AP, el negociador de la Alianza Cívica, José Pallais, dijo que el gobierno "intenta presentar una posición de fuerza para seguir sin cumplir importantes acuerdos tomados en la mesa de negociación".
"El gobierno aún no le ha informado al pueblo por qué rechaza volver a dialogar cuando faltan 120 presos políticos pendientes de salir y cuando la liberación definitiva de los más de 640 excarcelados aún no se ha dado", y agregó que el gobierno tampoco ha cumplido "ninguno de los 19 puntos del acuerdo sobre derechos y garantías ciudadanas" que permitiría la restitución plena de las libertades de expresión, información y movilización en el país.
Por la tarde, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos publicó en su cuenta de Twitter “lamenta” la intención del gobierno nicaragüense de no continuar el diálogo “en un contexto de persistencia de violaciones a los #DDHH y ante la necesidad de reformas que garanticen la no repetición”. Agregó que el organismo “observa” que la crisis persiste y que “hay persecución a opositores por medio de detenciones, amenazas y asedio; faltan investigaciones imparciales en los asesinatos que siguen ocurriendo; las libertades públicas permanecen suspendidas”.
La decisión oficial se conoció al mismo tiempo que en un grupo de países iniciaron en la OEA la formación de una comisión especial que realizará gestiones diplomáticas para ayudar a una salida negociada a la crisis de Nicaragua.
Las protestas de 2018 en Nicaragua fueron reprimidas con violencia por policías y paramilitares y dejaron al menos 325 civiles muertos, más de 2.000 heridos, 770 presos y más de 62.000 exiliados, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.