Denuncian abuso de poder en agencia de refugiados palestinos
NACIONES UNIDAS (AP) — Los responsables de la agencia de Naciones Unidas para los refugiados palestinos, incluido el comisario general Pierre Krahenbuhl, “han participado en relaciones sexuales inapropiadas, nepotismo, venganza, discriminación y otros abusos de autoridad”, según un reporte confidencial de la oficina de ética de la agencia.
Estos actos se realizaron “por beneficio personal, para suprimir las discrepancias legítimas y en general para alcanzar sus objetivos personales, poniendo en peligro la credibilidad e intereses de la agencia”, según el reporte, al que tuvo acceso The Associated Press.
Estos sucesos suponen “un riesgo significativo y extremadamente grave de seguridad, operativo y de reputación para la agencia”, según el reporte de 10 páginas, del que informó primero Al Jazeera.
Las acusaciones se conocen después de que la Agencia Ayuda y Obras de Naciones Unidas, conocida por sus siglas en inglés, UNRWA, sobreviviera por poco a la pérdida sin precedentes de toda la asistencia de Estados Unidos, su mayor donante, y mientras disfruta de “un alud de apoyo también sin precedentes de donantes nuevos y antiguos, así como de buen voluntad global”, señaló el informe.
Las acusaciones se están investigando y el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, no hará comentarios al respecto hasta que se complete el proceso, indicó el viceportavoz de la ONU Farhan Haq. Krahenbuhl “ha hecho una labor excelente, pero lo decimos al margen del resultado de esta investigación”.
El “círculo interno” de la agencia _que incluía a Krahenbuhl; su número dos, Sandra Mitchell; el jefe de personal, Hakam Shahwan, y la asesora de alto nivel Maria Mohammedi_ han eludido el proceso normal de toma de decisiones y relegado directores de campo y programas, entre otros empleados de alta categoría, según indicó el reporte citando información de 25 directores y empleados actuales y pasados de UNRWA.
Según el informe, el comisario general, nombrado el 30 de marzo de 2014, comenzó una relación con Mohammedi a finales de ese año que “fue más allá de lo profesional”, creó un “entorno tóxico” y causó “situaciones bochornosas frecuentes”. Cuando directores que ya no trabajan en la agencia plantearon el tema a Krahenbuhl, indicó el reporte, “se sintieron cada vez más aislados o marginados”, y uno creía que sus comentarios habían sido clave para que no se renovara su contrato.
Mohammedi rechazó las acusaciones como “falsas” y “malintencionadas” en declaraciones a Al Jazeera. Por su parte, Mitchell negó a la televisora todas las acusaciones, incluyendo que abusó de su poder para conseguir un empleo a su esposo, y renunció a finales de julio. Shahwan se marchó a principios de julio.
Por su parte, Krahenbuhl rechazó “sin reservas” el contenido del informe, según Al Jazeera, mientras que la cúpula de UNRWA dijo estar cooperando con la investigación y que aplicaría cualquier “medida correctiva u otras acciones de gestión” que recomendara.
El informe señaló que la concentración de poder en la agencia comenzó en 2015 y escaló después de que Estados Unidos recortara su financiamiento de 360 millones de dólares a apenas 60 millones de dólares en 2018. La agencia no recibió dinero del gobierno de Donald Trump este año.
El comisario general ha dicho que 42 países e instituciones elevaron sus contribuciones el año pasado para que la agencia pudiera financiar su presupuesto de 1,2 millones de dólares. Krahenbuhl dijo que las promesas de los donantes este año, que ascendían a 113 millones de dólares a finales de junio, era un paso alentador pero no bastaba para aliviar el “precario” financiamiento para ayudar a 5 millones de refugiados palestinos este año.
Por su parte, el reporte concluyó que “en principio, hay una cantidad abrumadora de pruebas” de que el comportamiento de los cuatro miembros de la cúpula supuso “abuso de autoridad”.