Protestan en Nicaragua pese a prohibición policial

  •  EnPelotas.com
    EnPelotas.com   |  

MANAGUA (AP) — Cientos de nicaragüenses desafiaron el jueves una prohibición oficial y salieron a protestar en Managua y otras ciudades del país contra el gobierno de Daniel Ortega, que movilizó tropas antimotines y policías con técnica canina en las principales avenidas de la capital.

Voceros de la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB) dijeron que un número no determinado de manifestantes fueron arrestados por la policía y varios resultaron golpeados. Sin embargo, el gobierno no ha confirmado esa información.

La policía prohibió el miércoles una marcha convocada por nueve organizaciones universitarias con motivo del día nacional del estudiante, alegando que quienes solicitaron el permiso tenían antecedentes penales. El gobierno mantiene prohibidas las manifestaciones opositoras desde septiembre del año pasado.

Ante el inusitado despliegue de fuerzas policiales en Managua, que desde temprano bloquearon la zona que recorrería la marcha, los manifestantes se dispersaron en barrios y centros comerciales de la ciudad donde realizaron mítines breves y focalizados, conocidos como “piquetes exprés”.

“Ninguno de nosotros está armado, sólo tenemos banderas, pero este gobierno está desquiciado. Es una dictadura que ha asesinado a más de 300 personas y necesitamos salir de ello”, dijo la activista Tamara Dávila Rivas, hija de dos exguerrilleros sandinistas, ya fallecidos.

Dávila participó en uno de los “piquetes” junto a dirigentes del sandinismo disidente, dirigentes feministas y expresos políticos que habían sido arrestados tras el estallido de las protestas estudiantiles el 18 de abril de 2018.

La policía bloqueó varios puntos de la transitada carretera a la ciudad de Masaya ante la aparición de manifestantes que gritaban en grupos, ondeaban banderas de Nicaragua y lanzaban globos azules y blancos, colores de la enseña nacional utilizada por la oposición.

“Ortega y (Anastasio) Somoza, son la misma cosa”, coreaban los protestantes, aludiendo al dictador derrocado en 1979 por las guerrillas sandinistas de las que formó parte el actual presidente, hoy de 73 años.

En uno de los incidentes, la policía disparó canicas de vidrio hacia un grupo de empleados del consorcio privado Grupo Pellas, que salieron a la calle a protestar. Uno de los cristales en la fachada del edificio resultó quebrado, según constataron periodistas.

El líder estudiantil Johnatan López, que estuvo preso durante ocho meses por protestar contra Ortega, dijo que la policía también lanzó bombas aturdidoras contra grupos de manifestantes.

“Nos están atacando, pero no vamos a suspender la lucha. Esperamos que estas protestas continúen por todo el país el día de hoy y los próximos días”, afirmó López. A su lado, los manifestantes gritaban consignas como “Libertad”, “Justicia” y “De que se van, se van”.

Otra protesta contra el gobierno se realizó en la ciudad de Matagalpa, al norte, donde manifestantes se refugiaron en la catedral después de que policías fuertemente armados intentaran rodearlos.

También en Masaya, 23 kilómetros al sureste de la capital, el gobierno desplegó efectivos policiales en torno a la iglesia San Miguel del emblemático barrio indígena de Monimbó, uno de los focos de las protestas antigubernamentales en 2018.

En declaraciones telefónicas a la AP, el párroco Edwin Román denunció que “varias camionetas llenas de policías se han instalado alrededor de la iglesia para intimidar a la gente e impedir la entrada a misa”.

El oficio religioso fue preparado en memoria de los estudiantes asesinados a lo largo de la historia de Nicaragua.

Pese a la nutrida presencia policial, decenas de fieles ingresaron a la parroquia. Muchos gritaban consignas como “No tenemos miedo” y “Eran estudiantes, no eran delincuentes”, en alusión a los cientos de jóvenes que murieron en las protestas de 2018.

El gobierno acusa a la oposición de haber promovido un “fallido golpe de Estado” contra Ortega que dejó 198 muertos en 2018, entre ellos 22 policías. Sin embargo, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) asegura que la acción de la policía y paramilitares al sofocar las protestas dejó 325 personas muertas y más de 2.000 heridas, en su mayoría jóvenes.

Publicado en Inicio » Mundo »