Brasil arresta a presuntos hackers de celular de ministro
SAO PAULO (AP) — La policía federal de Brasil arrestó a cuatro personas sospechosas de haber hackeado el teléfono del ministro de Justicia Sérgio Moro, un miembro importante del gabinete del presidente de ultraderecha Jair Bolsonaro y quien anteriormente fungió como renombrado juez anticorrupción.
Un juez federal en Brasilia, capital del país, ordenó los arrestos de Gustavo Henrique Elías Santos, Suelen Priscila de Oliveira, Danilo Cristiano Marques y Walter Delgatti Neto. Los detenidos viven en distintas ciudades del estado de Sao Paulo, pero supuestamente se conocieron en la localidad rural de Araraquara.
El grupo infiltró las cuentas de Moro en aplicaciones de mensajería, de dos jueces federales y de dos investigadores de la policía federal, señaló el juez Vallisney de Souza. Más tarde, un analista forense federal dijo que el grupo pudo haber hackeado más de 1.000 teléfonos, entre ellos el del ministro de Economía Paulo Guedes.
La orden fue emitida el viernes pasado, pero se hizo pública hasta el miércoles.
Moro, que también dirige la policía federal de Brasil, dijo el 5 de junio que su teléfono había sido hackeado.
Cuatro días después, el sitio web The Intercept Brasil y otros medios comenzaron a publicar informes basados en conversaciones filtradas entre Moro y fiscales durante la época en que el ministro era juez federal en una importante investigación anticorrupción conocida como Lava Jato, que derivó en los arrestos de muchas personalidades de la élite empresarial y política de Brasil, incluido el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.
El fallo de Oliveira no establece un vínculo directo entre las detenciones y los supuestos diálogos en el chat, que han causado gran agitación en la política brasileña y ocasionaron que Moro tuviera que prestar testimonio ante el Congreso en un ambiente convulso.
El juez manifestó en su decisión que “hay fuertes indicios de que los sospechosos formaron una organización criminal para cometer delitos, y se unieron para violar la confidencialidad de los teléfonos de varias autoridades brasileñas a través de la invasión de la aplicación Telegram”.
Oliveira también señaló que dos miembros del grupo hicieron transacciones sospechosas estimadas en 167.000 dólares entre el 18 de abril y el 29 de junio.
Ariovaldo Moreira, abogado de los sospechosos Elías Santos y de Oliveira, dijo que gran parte de esos fondos provinieron de negociaciones con bitcoin. Ambos rechazan haber cometido una acción ilegal, agregó.
The Associated Press no pudo contactar a los abogados de Danilo Cristiano Marques y Walter Delgatti Neto.
Un investigador de la policía federal, Joao Vianey Xavier Filho, dijo que los cuatro sospechosos tienen antecedentes de delitos financieros.
Moro tuiteó que los sospechosos fueron “la fuente de confianza de aquellos que publicaron los presuntos mensajes obtenidos a través del crimen”.