Uruguay reduce número de generales y coroneles del ejército
MONTEVIDEO (AP) — En un nuevo capítulo de la tensa disputa entre el gobierno y los militares, el Parlamento uruguayo aprobó esta semana una nueva la ley que reduce de 16 a 12 el número de generales del ejército y de 198 a 130 los coroneles.
La decisión llega al mismo tiempo en que un excomandante del ejército, recientemente cesado por el presidente Tabaré Vázquez, se ha transformado en un líder político emergente y recoge un sorprendente apoyo como candidato para las elecciones presidenciales que se celebrarán en octubre.
Se trata del general Guido Manini Ríos, quien en pocos meses ha logrado encabezar un movimiento político que capta el descontento militar y de otros sectores de la ciudadanía.
La reducción de mandos definida por el Parlamento también alcanza en menor medida a la Armada.
La nueva norma derogó, además, la llamada “obediencia debida”, un concepto usado para justificar las violaciones a los derechos humanos que se cometieron durante la dictadura militar que gobernó el país entre 1973 y 1985.
“Un miembro de las fuerzas armadas ya no tiene por qué acatar una orden que sea violatoria de las leyes, de la constitución y de los principios generales del ordenamiento republicano”, dijo la senadora oficialista Constanza Moreira al Canal 12 de televisión.
La nueva ley fue aprobada en el Senado por 17 votos a favor sobre un total de 31, tras un crispado debate. Votaron afirmativamente los senadores de la gobernante coalición de izquierda Frente Amplio y el único senador del Partido Independiente, una agrupación de centroizquierda.
Todos los senadores de los opositores partidos Nacional y Colorado votaron en contra, señalando múltiples inconsistencias en la ley. El senador Javier García, del Partido Nacional, dijo que la “obediencia debida” ya había sido derogada hace 13 años por otra norma.
El proyecto había sido aprobado en mayo en la Cámara de Diputados.
Se estima que durante la dictadura desaparecieron 192 uruguayos. Aproximadamente 40 fueron detenidos en Uruguay durante el régimen de facto o en años previos, cuando el país cayó en un ciclo de violencia política. Los restantes fueron apresados en países vecinos, la mayoría en Argentina. No se sabe si desaparecieron allí o si ocurrió tras ser trasladados a Uruguay clandestinamente. Solamente han sido localizados cuatro cuerpos de desaparecidos.
La nueva ley fue calificada como “perjudicial” por Manini Ríos, candidato a la presidencia por el partido derechista Cabildo Abierto, la sorpresa de la campaña electoral.
“Esta ley no contesta la pregunta que debió haber contestado una ley orgánica militar, que es qué fuerzas armadas queremos”, dijo Manini Ríos a radio Carve. Agregó que la reducción de coroneles no responde a ningún estudio serio sobre cuántos se necesitan.
En marzo, el presidente Vázquez cesó a Manini Ríos como comandante en jefe del ejército por cuestionar al Poder Judicial por las condenas a militares por violaciones a los derechos humanos.
Apenas dos semanas después, Vázquez también cesó al sucesor de Manini Ríos, el general José González, por haber estado al tanto y no haber denunciado que un militar retirado había admitido ante un tribunal de honor del ejército que en 1973 había arrojado a un río el cuerpo de un militante tupamaro hoy desaparecido.
Pocos días después, Manini Ríos tildó de “canalla” al presidente Vázquez y anunció su candidatura a presidente por Cabildo Abierto. La nueva agrupación sorprendió a los analistas en las elecciones internas del 30 de junio, cuando reunió casi 47.000 votos que lo posicionaron como el cuarto partido en importancia.
Uruguay tiene 3,4 millones de habitantes y 2,7 millones de habilitados para votar. En las elecciones internas votó el 40% del electorado.