Prohíben salir de Perú a exalcalde de Lima por caso OAS

LIMA (AP) — Una jueza peruana anticorrupción prohibió salir del país por 18 meses al exalcalde de Lima, Luis Castañeda, investigado por presuntamente recibir dinero sucio de OAS, la segunda empresa constructora brasileña después de Odebrecht que decide colaborar con la justicia peruana en su pesquisa de la corrupción en el país.

La jueza María de los Ángeles Álvarez notificó su decisión a la agencia nacional de migraciones por la investigación a nivel fiscal que se le sigue al único político peruano --que llegó a ser tres veces alcalde de Lima-- debido a los presuntos delitos lavado de activos y corrupción. Castañeda, conocido como “el mudo” por su tendencia a evitar declarar ante la prensa, no ha emitido ningún comentario por la decisión judicial.

De acuerdo a las investigaciones de la fiscalía, OAS otorgó 220.000 dólares a la campaña electoral del exalcalde en 2014 con el objetivo de elevar posteriormente sus ganancias a través de una concesión de peajes que la constructora tenía adjudicada sobre una vía clave para Lima, la cual conecta a lo largo de nueve kilómetros la zona este de la ciudad con el principal puerto peruano, ubicado en el extremo oeste de la capital.

Castañeda llegó a conquistar tres veces la alcaldía de la capital peruana en los periodos 2003-2006, 2007-2010 y 2015-2018.

No es el único alcalde de la plaza electoral más importante de Perú que está en problemas. Susana Villarán, alcaldesa izquierdista de la capital en el periodo 2011-2014, está presa por 18 meses desde mayo mientras es investigada por lavado de activos por presuntamente recibir alrededor de diez millones de dólares de OAS y también de Odebrecht.

La justicia peruana investiga la corrupción en obras de infraestructura desde principios del siglo XXI en el país andino. De acuerdo a la fiscalía, al menos cinco exejecutivos de OAS han decidido delatar todas las prácticas corruptas en las que participaron.

En febrero un exejecutivo de OAS, Alexandre Portela Barbosa, declaró a la fiscalía brasileña que la constructora usó contratos ficticios entre 2010 y 2014 en varios países, entre ellos Perú, por unos 120 millones de dólares.

De acuerdo con la investigación de la fiscalía peruana, OAS fue, después de Odebrecht, la segunda empresa con mayores operaciones de construcción en Perú.