El exceso de confianza castiga a Chile
PORTO ALEGRE, Brasil (AP) — Todo parecía a pedir de boca para Chile.
La Roja había resurgido en la Copa América, su torneo predilecto. Superior en talento individual y experiencia sobre Perú de acuerdo con todos los análisis, había seguridad de que iba a vencer a su viejo rival para acceder a su tercera final consecutiva del torneo sudamericano.
Una gélida noche en Porto Alegre resultó en pesadilla. Chile sucumbió sin paliativos el miércoles por 3-0 ante Perú en semifinales.
La selección chilena buscaba convertirse en el primer conjunto en ganar la Copa América en tres ediciones consecutivas desde que Argentina lo hizo en la década de los 40. Ahora tendrá que consolarse con disputar el partido por el tercer lugar en Sao Paulo el sábado frente a los argentinos, a quienes vencieron en definiciones por penales en las finales de 2015 y 2016.
Ahí estuvo el problema de la Roja, diagnosticó su técnico Reinaldo Rueda. Chile ya se veía en la final del domingo en el estadio Maracaná de Río de Janeiro y el exceso de confianza le pasó factura.
"Entramos más pensando en jugar la final el domingo que en resolver este partido y ahí nos sorprende Perú", sentenció Rueda.
El técnico colombiano lamentó que Chile no supiera enchufarse de entrada en el partido y se encontrara con un Perú en ebullición inmediata.
Edison Flores y Yoshimar Yotún anotaron a los 21 y 38 minutos, respectivamente, para encarrillar la victoria peruana. Paolo Guerrero sentenció a los 90 para ahora dirigirse a Río.
“Perú resolvió el partido muy temprano, en 20 minutos”, comentó Rueda. “No entramos en el juego. Chile no mostró la actitud y agresividad de los partidos anteriores. El segundo gol es una ingenuidad nuestra y resuelve el partido”.
“La sensación que se tiene es de un juego que reaccionamos después del segundo gol”, añadió. “En el segundo tiempo lo intentamos pero Perú hace un bloque de espera. Tuvimos ocasiones pero no era fácil porque Perú ya había hecho su negocio”.
Fue una noche en la que no acertaron en casi nada. En la fallida reacción en el complemento, se toparon con las manos del arquero peruano Pedro Gallese, tapando remates que Arturo Vidal, Alexis Sánchez, Eduardo Vargas y Jean Beausejour apuntaron a las redes.
Ni siquiera pudieron capitalizar la oportunidad de maquillar el resultado con un penal que Vargas falló en los descuentos al querer picar el balón ante Gallese, quien fácilmente contuvo.
"En semifinales uno no se puede equivocar como lo hicimos hoy”, comentó el volante Vidal. “Le dimos mucha ventaja y supieron ganarlo. No tuvimos suerte, el arquero de ellos sacó goles hechos. Se dio un resultado que no reflejó lo que pasó en la cancha”.
Rueda llegó a la Copa América en medio de un ambiente agorero: los flojos resultados posteriores al fracaso que dejó a Chile fuera del Mundial de Rusia 2018 hacían presumir que lo mejor de la llamada “Generación Dorada”, liderada por Vidal y el delantero Sánchez, había quedado en el pasado y que no habían encontrado recambio.
Pero hicieron una brillante primera ronda y luego eliminaron a Colombia por penales en los cuartos de final. Los colombianos pisaban fuerte tras haber sido el único equipo en ganar sus tres partidos de la fase de grupos.
“Para mí la ilusión era llegar a la final”, dijo Rueda. “No sé qué factor importó para que esos primeros 20 minutos hayan influido así en el juego. Pensamos en jugar la final sin haber dado este paso primero. Es una amargura”.