Hong Kong: Manifestantes entran a la fuerza a legislatura
HONG KONG (AP) — Cientos de manifestantes irrumpieron el lunes por la noche en la legislatura de Hong Kong, destrozando retratos oficiales y haciendo pintas con consignas a favor de la democracia en los muros de la cámara principal para después retirarse, luego de que policías antimotines desalojaron las calles circundantes con gases lacrimógenos e ingresaron al recinto.
La ocupación de tres horas, que terminó el martes por la madrugada, ocurrió en el 22 aniversario del retorno de esa antigua colonia británica a China, y reflejó la frustración con la lideresa de Hong Kong por no responder a las exigencias de los manifestantes después de varias semanas de protestas. Las manifestaciones fueron desatadas por una propuesta legislativa que proponía cambiar las leyes para permitir la extradición de sospechosos a China para ser enjuiciados allá.
Los manifestantes golpearon las gruesas ventanas de vidrio hasta que las rompieron, y también lograron abrir las puertas de seguridad de metal. La policía inicialmente retrocedió mientras los manifestantes entraban, evitando una confrontación y dándoles acceso al edificio.
Los manifestantes se pararon sobre los escritorios de los legisladores en la cámara principal y pintarrajearon el símbolo del territorio que estaba en una pared. También escribieron consignas que exigen una elección democrática del gobierno municipal y denuncian la medida de extradición. Muchos lucieron cascos amarillos y blancos, máscaras y camisetas negras que se han convertido en su uniforme.
La policía luego anunció que pronto se movilizaría. Un portavoz había advertido antes que usarían la "fuerza apropiada". Los agentes se acercaron al edificio poco después de la medianoche e ingresaron a las cámaras legislativas cuando los manifestantes evacuaron. No se reportó por el momento ningún arresto o heridos.
El asalto hizo que los organizadores de una marcha pacífica diferente, también contra la medida de extradición, cambiaran la ruta y no terminara en la legislatura, sino en un parque aledaño, luego que la policía les pidió que suspendieran la manifestación o cambiaran de ruta.
La policía calculó la asistencia de la marcha pacífica en unos 190.000, la tercera más concurrida en tres semanas. Los organizadores la calcularon en 550.000.
La iniciativa de ley sobre extradiciones aumentó los temores de erosión de libertades en el territorio, que Gran Bretaña regresó a China el 1 de julio de 1997. El debate sobre la iniciativa ha sido suspendido indefinidamente. Los manifestantes quieren que la medida sea retirada formalmente y piden la renuncia de la gobernante de Hong Kong, Carrie Lam.
Lam, quien ha sido criticada duramente por promover la propuesta, se comprometió a ser más receptiva al sentir popular pero no ha respondido directamente a las exigencias de los manifestantes.
En su discurso al izar la bandera durante una ceremonia para celebrar el aniversario de la entrega, Lam dijo que las manifestaciones y dos marchas previas que atrajeron a cientos de miles de personas le han enseñado que necesita escuchar mejor a los jóvenes y la gente en general.