El Salvador endurece medidas de seguridad en cárceles
SAN SALVADOR (AP) — El Salvador extremó el sábado las medidas de seguridad en todas las cárceles del país y trasladó a otras prisiones a más de un millar de pandilleros que se hallaban reguardados en un complejo penitenciario exclusivo para miembros de la pandilla Barrio 18.
Las autoridades informaron que en cumplimiento de la orden del presidente Nayib Bukele de endurecer las medidas de seguridad, fueron trasladados a otras cárceles 1.022 pandilleros que estaban en el penal de Izalco, en el occidente del país, destinado para resguardar a la pandilla Barrio 18.
Desde hace ya varios años, las autoridades de los penales tomaron la decisión de ubicar en diferentes cárceles a los miembros de las pandillas Barrio 18 y Mara Salvatrucha (MS-13), debido a la rivalidad que existe, ya que cuando estaban en una misma prisión terminaban atacándose, dejando heridos y muertos.
Osiris Luna, director General de Centros Penales, señaló en su cuenta oficial de Twitter que con estos traslados “rompimos con penales exclusivos de una sola pandilla, donde imponían sus reglas. Hemos puesto a todos los grupos terroristas en un mismo centro. Les vamos a demostrar que el Estado se respeta”.
Explicó que el objetivo de los traslados es cortar las órdenes de los pandilleros hacia sus territorios y desmantelar posibles atentados.
El presidente Bukele ordenó endurecer las medidas de seguridad y extender indefinidamente el estado de emergencia y perseguir a los criminales, luego que la noche del viernes presuntos pandilleros secuestraron un autobús del transporte colectivo, retuvieron a unas 40 personas _a quienes les robaron sus pertenencias_, y violaron a dos mujeres.
Unos cinco pandilleros con armas de fuego y los rostros cubiertos interceptaron el autobús que realiza su recorrido de San Salvador al occidente país, obligaron al conductor a salirse de la carretera, robaron pertenencias de los pasajeros y abusaron de las mujeres.
“Hasta el momento no se reportan homicidio, pero si dos mujeres violadas. Malditos, vamos tras ellos, no se van a escapar. Y no me salgan con ser suaves, les va a caer todo el peso de la ley”, escribió Bukele en su cuenta oficial de Twitter al trascender la información sobre el ataque.
Bukele también ordenó endurecer las medidas de seguridad y ampliar indefinidamente el estado de emergencia en todas las cárceles. Anunció que se enviarán a la zona a las fuerzas especiales de la policía y de la fuerza armada a perseguir a los criminales.
Ante el incremento de la violencia de las pandillas, fuerzas combinadas de la policía y del ejército salvadoreño pusieron en marcha recientemente el despliegue en las zonas comerciales del centro histórico de la capital y de otros 11 municipios del interior del país con presencia de las pandillas para atacar las finanzas de estos grupos criminales.
El presidente también obligó a las empresas telefónicas que operan en el país a cortar por completo la señal telefónica en todas las cárceles para evitar que los pandilleros ordenen desde esos recintos asesinatos y extorsiones.
Luego que Bukele asumiera la presidencia del país, las pandillas incrementaron sus acciones de violencia atacando a las fuerzas de seguridad y solo en una semana asesinaron a cuatro policías.