Nuevo Laredo recibirá a migrantes devueltos por EEUU
CIUDAD DE MÉXICO (AP) — La ciudad mexicana de Nuevo Laredo comenzará a recibir a migrantes que sean enviados por Estados Unidos incluso esta semana para aguardar en México en lo que se procesan sus solicitudes de asilo, informaron el lunes las autoridades.
México y Washington acordaron expandir el programa conocido como Protocolo de Protección a Migrantes, al que también se le conoce como “Permanezca en México”, durante las negociaciones previas que evitaron la imposición de aranceles de Estados Unidos a todas las importaciones procedentes de México.
Se prevé que se implemente la expansión en tres puntos fronterizos. El alcalde de Nuevo Laredo, Enrique Rivas, confirmó que su ciudad ubicada al otro lado de la frontera con Laredo, Texas, es uno de ellos. Ubicada en el estado de Tamaulipas, asolado por la delincuencia, podría recibir hasta 200 solicitantes de asilo diariamente a partir del viernes.
Las implementaciones previas del programa en dos puntos de la frontera entre México y California y en el cruce entre Ciudad Juárez y El Paso, Texas, comenzaron con cifras mucho más pequeñas y han ido en aumento gradual. Las autoridades de Nuevo Laredo señalaron que el gobierno mexicano no ha indicado a cuántas personas recibirá la ciudad.
“Es un tema humanitario que en la medida de nuestras capacidades estaremos atendiendo”, dijo el alcalde. “El gobierno federal deberá responsabilizarse al ser ellos quienes tomaron esta decisión. Seguiremos tocando puertas para bajar recursos; el gobierno municipal está superado".
Algunos expertos han expresado su preocupación sobre la posible implementación del programa en Tamaulipas, donde los cárteles del narcotráfico controlan grandes porciones del territorio y se aprovechan de los migrantes vulnerables.
El Departamento de Estado prohíbe la mayoría de los viajes de empleados del gobierno federal a Tamaulipas, y advierte a los ciudadanos estadounidenses que no visiten la entidad debido al alto número de secuestros y otros delitos. Es uno de cinco estados mexicanos que actualmente tienen una alerta de viaje de nivel cuatro, la más severa del Departamento de Estado.
“Crímenes violentos como asesinatos, robos a mano armada, robos de autos, secuestros, extorsiones, y abuso sexual son comunes”, de acuerdo con la alerta de viaje de la dependencia. “Actividad de grupos delictivos, incluyendo tiroteos y bloqueos, son generalizados. Los grupos delictivos armados atacan los autobuses de pasajeros públicos y privados, así como vehículos privados que transitan por Tamaulipas, a menudo tomando a los pasajeros como rehenes y exigiendo el pago de un rescate. Las fuerzas de seguridad estatales y federales tienen una capacidad limitada para responder a la violencia en muchas partes de la entidad”.
Rivas y el secretario del Ayuntamiento, Raúl Cárdenas Thomae, indicaron que los la ciudad ya alberga a unos 3.000 migrantes, y analiza la posibilidad de abrir otro refugio para dar cabida al incremento previsto de personas.
Cárdenas dijo que Nuevo Laredo recibiría a los migrantes que fueran enviados de regreso en el tramo fronterizo que va de Roma, Texas, a Ciudad Acuña, en el estado de Coahuila, un recorrido de alrededor de 420 kilómetros (260 millas).
Con el programa, más de 14.000 migrantes han sido devueltos a México desde que comenzó en enero, según las cifras más recientes del gobierno mexicano.
La política estadounidense se enfoca en controlar el incremento en la llegada de migrantes, principalmente centroamericanos, a la frontera de Estados Unidos, muchos de ellos viajando en familias. El gobierno del presidente Donald Trump espera que los migrantes se sientan menos alentados a realizar el viaje si saben que tienen que esperar en México durante meses o incluso años debido a un enorme y creciente número de retrasos en las cortes de inmigración.
El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos no ha proporcionado detalles específicos sobre la expansión prevista de la medida.
México también está utilizando a miles de soldados y policías para respaldar el control migratorio en apego a su acuerdo con Washington.
El secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, dijo el lunes en la ciudad caribeña de Cancún que, además de los 6.500 agentes de la Guardia Nacional en la frontera sur de México, hay unos 15.000 elementos para la región norte, reportó el periódico La Jornada.