Incidente policial empaña la campaña de Boris Johnson
LONDRES (AP) — Boris Johnson, el precandidato favorito para convertirse en el próximo primer ministro de Gran Bretaña, enfrentaba presión el domingo para que declarara sobre una visita que la policía efectuó a su apartamento en Londres tras un presunto pleito con su novia.
Rivales políticos fustigaron a Johnson por rehusarse a comentar sobre el incidente del viernes por la mañana, cuando los agentes tocaron a su puerta luego que un vecino reportó gritos y golpes en la casa donde el líder del Partido Conservador vive con su pareja, Carrie Symonds.
Tras cinco rondas de elecciones de legisladores del Partido Conservador, el exsecretario de Relaciones Exteriores de Gran Bretaña y exalcalde de Londres terminó siendo el favorito para reemplazar a Theresa May como líder del partido y primer ministro de Gran Bretaña.
Al preguntársele varias veces sobre la visita policial durante un foro del Partido Conservador el sábado, Johnson respondió que el público no querría "escuchar acerca de ese tipo de cosas". Dijo que la gente debería juzgar su carácter con base en su historial como alcalde de Londres y sus planes para encabezar a Gran Bretaña.
Pero el incidente siguió dominando los titulares británicos el domingo. El otro precandidato en la segunda vuelta para ser el líder del Partido Conservador, el secretario de Relaciones Exteriores Jeremy Hunt, dijo que Johnson no debería "rehuir" las preguntas.
"No voy a comentar sobre la vida personal de Boris... pero lo que Boris tiene que hacer es participar apropiadamente en este debate de liderazgo", dijo Hunt a Sky News. "Esta es una audición para ser primer ministro del Reino Unido, y Boris tiene que demostrar que está preparado para contestar preguntas difíciles".
La policía ha dicho que los agentes que llegaron al apartamento encontraron a todos los ocupantes "a salvo y bien" y que no se había cometido ningún delito
El vecino que llamó a la policía, Tom Penn, dijo al periódico The Guardian que los gritos eran "lo suficientemente fuertes e iracundos como para asustarme y preocuparme por el bienestar de los involucrados".
Los alegatos de que él filtró su grabación de la discusión al diario de tendencia izquierdista son "estrafalarios y ficticios", dijo Penn.
"Creo que es razonable que alguien que probablemente se convertirá en el próximo primer ministro rinda cuentas por todas sus palabras, acciones y comportamientos”, afirmó Penn en un comunicado publicado por The Guardian.