Egipto acusa a la ONU de politizar la muerte de Morsi
EL CAIRO (AP) — El gobierno egipcio acusó el miércoles a la oficina de derechos humanos de Naciones Unidas de tratar de politizar la muerte del expresidente de Egipto Mohammed Morsi, quien perdió la conciencia esta semana durante su juicio en una corte de El Cairo.
Morsi, el primer presidente democráticamente elegido de Egipto y que pertenecía a la ahora proscripta Hermandad Musulmana, fue enterrado el martes en medio de fuertes medidas de seguridad, un día después de su caída y muerte en un tribunal cairota.
Rupert Colville, vocero del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, reclamó una "investigación inmediata, imparcial, exhaustiva y transparente" de la muerte del exmandatario.
El portavoz del Ministerio de Exteriores, Ahmed Hafez, tachó de inaceptables las declaraciones de Colville y dijo que intentó "deliberadamente politizar la muerte natural" de Morsi durante su juicio por espionaje.
Las "inmaduras y politizadas" declaraciones de Colville encajan con las de un país que explota la muerte de Morsi por motivos políticos, afirmó Hafez, en una probable referencia a Turquía.
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, que tenía estrechos lazos con Morsi y su movimiento Hermandad Musulmana, dijo que no creía que Morsi hubiera muerto por causas naturales.
Erdogan reiteró sus acusaciones el miércoles en un discurso en Estambul, en el cual declaró que Morsi se "agitó violentamente" en el tribunal durante 20 minutos y nadie acudió en su ayuda.
Erdogan, un fuerte crítico del gobierno del presidente egipcio Abdel-Fattah el-Sissi, dijo que Turquía hará todo lo posible para garantizar que Egipto sea juzgado por la muerte de Morsi. Pidió a la Organización de Cooperación Islámica que "tome las medidas necesarias" ante la muerte de Morsi.
El-Sissi no ha hecho declaraciones sobre la muerte de Morsi.
Grupos defensores de los derechos humanos expresaron la esperanza de que el deceso atraiga la atención sobre las condiciones en las cárceles egipcias.
La Red Árabe de Información sobre Derechos Humanos dijo que "no pueden guardar silencio sobre la muerte lenta de los opositores presos".