Funcionarios: Diplomáticos hablan en Suecia sobre Venezuela

BOGOTÁ (AP) — Suecia albergará pláticas multilaterales entre los principales actores que intentan resolver la revuelta política en Venezuela, el esfuerzo más reciente por reanimar los flojos intentos de llegar a una solución pacífica para la cada vez más profunda crisis que atraviesa la nación sudamericana.

Un diplomático europeo dijo el jueves que representantes de Rusia, Naciones Unidas, el Vaticano, Cuba y la Unión Europea asistirían a las negociaciones. Un funcionario estadounidense con conocimiento del tema dijo que su país fue invitado pero que decidió no participar.

“Las conversaciones en Estocolmo son para reforzar el diálogo en Noruega”, dijo el diplomático europeo, refiriéndose a las pláticas en Oslo entre el gobierno de Venezuela y la oposición, mismas que se han estancado en los últimos días. “Todas las partes sienten la necesidad de mantener la mayor discreción posible debido a que la mediación pasa por una etapa delicada”.

La reunión en Estocolmo se da en medio de una creciente presión internacional por alcanzar una solución negociada en la disputa por el poder en Venezuela. El líder opositor Juan Guaidó ha canalizado la frustración de los molestos venezolanos, que sufren desabasto de alimentos y cuya situación ha empeorado a causa de las aplastantes sanciones de Estados Unidos, pero ha sido incapaz de debilitar el mandato del presidente Nicolás Maduro o de persuadir al ejército.

En una breve declaración durante una gira por el estado de Mérida, en el occidente de Venezuela, Guaidó dijo que había un diálogo en Estocolmo para discutir la crisis venezolana, pero no ofreció más detalles.

“Esta reunión demuestra claramente que ya hay consenso en el mundo que debe haber una nueva elección presidencial libre en Venezuela”, declaró.

Pero otro diplomático europeo con conocimiento de las pláticas minimizó cualquier esperanza de avances inmediatos. Describió la reunión excepcional más como una sesión para romper el hielo con la intención de sentar en la mesa a distintas figuras externas que puedan contribuir a las labores de reconciliación internas en Venezuela.

Para aliviar tensiones, se dejó fuera de manera intencional a Guaidó y Maduro, dijo el diplomático, que habló bajo condición de anonimato debido a que se suponía que las negociaciones fueran privadas. El objetivo original de los organizadores era atraer a Rusia bajo el entendido de que el principal aliado militar y financiero de Maduro es vital para cualquier solución al estancamiento.

Una fuente del gobierno venezolano con conocimiento de las pláticas se refirió a ellas como una pérdida de tiempo y dijo que sólo participaban diplomáticos de bajo nivel.

Una portavoz del ministerio del Exterior de Rusia, Maria Zakharova, confirmó la reunión e indicó que Rusia contaba con la representación de Alexander Shchetinin, director para Sudamérica de la dependencia.

Enrique Iglesias, un experimentado diplomático que fue asignado recientemente como enviado especial de la Unión Europea para Venezuela, también forma parte de la reunión, según un representante que habló bajo condición de anonimato debido a que no contaba con autorización a tocar el tema de manera pública.

Noruega ha promovido dos rondas de pláticas exploratorias para la próxima semana con la intención de reunir a las partes. No han salido a la luz muchos detalles del diálogo. Pero ante la presión de un sector intransigente de la coalición opositora, Guaidó dijo la semana pasada que no participaría en pláticas adicionales con el gobierno a menos de que se cumpla su exigencia de nuevas elecciones presidenciales.

Alrededor de 50 países, incluyendo Estados Unidos, consideran que los comicios presidenciales venezolanos de 2018 fueron ilegítimos, en gran medida debido a que no contaron con la participación de opositores de renombre.

Maduro ha defendido la legalidad de su reelección del año pasado, y no ha mostrado indicios de que pretenda volver a hacer campaña en el corto plazo.

Pero las opciones de la oposición parecen reducirse cada vez más. El entusiasmo inicial entre los miles de venezolanos que salieron a las calles en respaldo de Guaidó ha disminuido. Un intento de rebelión militar el pasado 30 de abril fue apagado rápidamente.

Conforme se prolonga la crisis, un gran número de venezolanos siguen huyendo del país, y la calidad de vida se deteriora constantemente para aquellos que deciden permanecer en Venezuela. Naciones Unidas calcula que alrededor de 4 millones de venezolanos han emigrado en los últimos años para escapar de la maltrecha economía que es asediada por la hiperinflación y un desabasto generalizado de alimentos y medicinas.

El gobierno emitió el jueves billetes de mayor denominación de bolívares en un intento por mantener el paso de la inflación. El banco central señaló que los billetes de 10.000, 20.000 y 50.000 bolívares ayudarían a realizar pagos y transacciones más eficientes. Pero el billete de mayor valor apenas equivale a 8 dólares.

Varios venezolanos se mostraron escépticos de las nuevas medidas.

Rafael Gerardi, un residente de Caracas de 57 años de edad, dijo que con los nuevos billetes sólo será más difícil obtener cambio después de realizar un pago.

"El problema es que cuando tú lo vayas a usar, ¿cómo vas a hacer tú para recibir el vuelto? O sea, te dan 10 mil bolívares en un billete de 10 mil y lo vas a pagar en una "camionetica” (autobús) que vale 500”, dijo Gerardi. “El problema... No sé cómo plantearlo ni siquiera porque no tiene ni lógica".

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Parra reportó desde Madrid. Los periodistas de Associated Press Kate de Pury en Moscú y Juan Pablo Arreaza en Caracas, contribuyeron a este despacho.