Paraguay: comienza juicio a cura por acoso sexual
ASUNCION (AP) — El sacerdote católico Silvestre Olmedo, antiguo párroco de una ciudad a las afueras de la capital paraguaya, comenzó a ser enjuiciado el viernes por presunto acoso sexual a una catequista. De ser hallado culpable podría ser sentenciado hasta a dos años de prisión.
El juicio oral y público se inició en el palacio de justicia del pueblo San Lorenzo, al sureste, pero tras las primeras deliberaciones e intercambio de posiciones entre las partes fue suspendido por pedido de los defensores del religioso.
La mujer de 24 años que lo acusa dijo a The Associated Press que el 21 de septiembre de 2016, Olmedo presuntamente le manoseó la espalda y el pecho estando a solas en un cuarto de la casa parroquial de ciudad Limpio, a 20 kilómetros al norte.
"Presenté la denuncia ante la fiscalía pero sólo en agosto de 2017 se produjo la imputación por acoso sexual", explicó.
The Associated Press no menciona por su nombre a las víctimas de agresión sexual a menos de que ellas hagan pública su identidad.
En tanto, Olmedo expresó a la AP en un breve receso del juicio del viernes: "niego que le haya tocado la espalda y el pecho a la señorita. Ratifico mi inocencia". Agregó que "me siento perseguido por ella porque no es cierta su acusación. Hoy estoy apartado de mi vocación pese a que en la casa de retiro en donde vivo con otros sacerdotes ayudo haciendo varios servicios a la comunidad, en forma pastoral".
Olmedo no podrá ejercer como sacerdote mientras dure este proceso.
Mientras se desarrollaba la audiencia, a las afueras del edificio un grupo de mujeres de la organización Plataforma de Universitarias Feministas (PUF) se manifestó en contra del expárroco.
Al interior de la sala, unas veinte personas de la feligresía de Limpio observaban. Alcides Benítez, uno de los laicos, dijo a la AP que contrataron un bus para acompañar y expresar su apoyo a Olmedo
La mujer que presentó la denuncia estaba con sus excompañeros catequistas. No ingresó a la sala por recomendación de sus abogadas esperando a que el tribunal la convocase para escuchar su versión.
El juicio fue suspendido, según informó Óscar Rodríguez, presidente del tribunal, tras escuchar un pedido de Rodrigo Yódice, uno de los defensores de Olmedo. Alegó que es inadmisible "la arbitrariedad de los magistrados” y solicitó un nuevo tribunal.
Rodríguez y los otros dos jueces tienen 18 días para rechazar la recusación o apartarse para la formación de otro tribunal.
Yódice explicó que su molestia se debió a que, supuestamente, el tribunal no tuvo en cuenta su pedido de eliminar cuatro pruebas de la comisión del presunto delito de acoso sexual presentadas por la fiscalía.
Mirta Moragas, una de las dos defensoras de la mujer, explicó a la AP que en el curso del juicio pedirá la declaración del arzobispo de Asunción, monseñor Edmundo Valenzuela, porque en 2017 emitió un comunicado minimizando la acción de Olmedo, calificandola como "conducta indecorosa".
"Además, en el comunicado afirmó que no se debe hacer una montaña de una piedrita", recordó.
En el primer día del juicio no estuvo presente ninguna autoridad eclesiástica.
Ni el arzobispado de Asunción ni la fiscalía poseen registros de curas condenados por abusos sexuales en los últimos años pero la prensa local dijo que en 2010 un presbítero fue condenado a ocho años de cárcel por abusar de un niño de 11 años.
Otro sacerdote fue condenado en 2014 a seis años de penitenciaría por abusar de dos monaguillos mientras que otros dos excuras párrocos están prófugos desde 2014.