Para brillar en la Final de la NBA, Siakam vino desde abajo
TORONTO (AP) — El trayecto al mejor debut en una Final de la NBA en siete años comenzó en Camerún y alcanzó Nuevo México hasta llegar a los suburbios de Toronto.
Pascal Siakam surgió de lugares poco conocidos antes de brillar en la máxima cita.
Eso hizo que la actuación de Siakam en el primer partido, con 32 puntos, fuera más impresionante. Los jugadores que suelen destacar a estas alturas del año son los prospectos que no pueden dejarse pasar y que parecen destinados a la grandeza desde su infancia.
Siakam ni siquiera había empezado a jugar básquetbol para entonces.
Pero allí estuvo la noche del jueves, encestando 14 de 17 tiros de campo para la victoria de Toronto 118-109 sobre Golden State.
“Nunca había visto nada como eso antes”, dijo el entrenador de los Raptors, Nick Nurse. “Ese es un escenario gigante para que un chico tenga ese tipo de actuación, casi sin ninguna experiencia”.
Fue la mayor cantidad de puntos en un debut de la serie final desde que Kevin Durant firmó 36 para Oklahoma City en 2012, y convirtió a Siakam en el primer jugador en anotar 30 o más con un acierto de por lo menos 80% en un duelo de la final desde que Shaquille O’Neal lo hizo en 2004.
Esos jugadores fueron seleccionados bien alto en el draft, al igual que Kareem Abdul-Jabbar, Hakeem Olajuwon y Tim Duncan, los otros jugadores desde 1970 con 30 puntos en el primer partido de una Final en su primeras tres campañas como profesionales.
Siakam fue elegido en el lugar 27 del draft de 2016. Draymond Green — una selección de segunda ronda por los Warriors — dijo que hay un nivel diferente de admiración para jugadores que acaban teniendo un papel estelar tras ser considerados como fichas secundarias.
“Llegas a esta liga y en realidad no hay espacio para ti”, señaló Green. “Esencialmente eres alguien que llegó, quiero decir, puedes quedar fuera en un año, puedes estar fuera en dos años, puedes quedar fuera en cuatro años. Y para ganar ese respeto y para, como dije antes, convertirte en uno de esos muchachos, creo que es especial. Siakam ha hecho eso”.
Siakam, de 2,05 metros, ya era un buen atleta, habiendo jugado fútbol en su niñez en Camerún. Pero fue su deseo de convertirse en un buen basquetbolista lo que lo mantuvo por muchas horas en el gimnasio para preparar su inicio tardío en el deporte.
Tomó parte de un campamento de Básquetbol sin Fronteras en Sudáfrica en 2012 a los 18 años y pronto estuvo en camino a Estados Unidos para embarcarse en una carrera dentro del básquetbol. Terminó en la Universidad Estatal de Nuevo México por dos temporadas, ganando el Jugador del Año de la ‘Western Athletic Conference’ en su segundo año, antes que los Raptors lo reclutaran.
Siakam fue el Jugador Más Valioso de la Final de la G League de la NBA en 2017, luego de ayudar a los Raptors 905 a ganar el título del campeonato de la liga de desarrollo, pero el éxito con el equipo grande tendría que esperar. No tenía un tiro confiable aún, no lo suficientemente confiable para ser un contribuidor regular en un equipo con 50 victorias. Pero desarrolló uno durante los veranos y lo desató sobre sus rivales durante esta temporada, cuando promedió 16,9 puntos y jugó lo suficientemente bien para ser finalista al premio del jugador con mejor progreso.
“Trabaja, trabaja y trabaja”, dijo Nurse sobre Siakam. “Se cuida. Realmente tiene un deseo ferviente de ser un muy buen jugador en esta liga”.
Pero el cambio más grande para Siakam llegó fuera de la cancha.
Estaba en el colegio cuando su padre, Tchamo, murió. Siakam, quien aún escribe en sus zapatillas “Descanse en Paz papá”, lo llamó el momento más difícil de su vida, pero dijo que fue el punto de inflexión para hacerlo la persona en que se ha convertido.
“Gracias a Dios tuve el apoyo de mis compañeros y entrenadores en la universidad, lo que me ayudó a pasar por ello. Pero fue definitivamente uno de los momentos más duros de mi vida, y no poder ir a casa para el funeral y todo eso”, concluyó Siakam.