Aumenta 20% la deforestación en la Amazonia de Brasil
RÍO DE JANEIRO (AP) — El ritmo de deforestación en la selva amazónica aumentó 20% en los últimos nueve meses, informó el lunes un grupo no gubernamental que ha dado seguimiento a la Amazonia por dos décadas.
Imazon señaló que las imágenes de satélite revelaron que la región ha perdido 2.169 kilómetros cuadrados (837 millas cuadradas) de selva entre agosto y abril, un incremento respecto a los 1.807 kilómetros cuadrados (698 millas cuadradas) perdidos en el mismo periodo del año previo.
El grupo comienza su año de monitoreo en agosto, para coincidir con la temporada seca de Brasil, y cuando los índices de tala generalmente están en su punto más alto.
Los analistas atribuyen la mayor parte de la deforestación a la tala desmedida y la invasión de tierras, que en ocasiones ocurren en zonas protegidas y reservas indígenas.
El presidente de Brasil Jair Bolsonaro y su ministro de Medio Ambiente han cuestionado la realidad del cambio climático y se han expresado a favor de incrementar la actividad minera y agraria, incluyendo en la Amazonia y zonas protegidas. Ambos creen que las leyes ambientales y los grupos activistas a menudo obstaculizan el potencial económico del país.
El ministro de Medio Ambiente Ricardo Salles dijo a inicios de mes que quería reformar el Fondo Amazonia, una iniciativa creada para contener la deforestación en un área de casi 7 millones de kilómetros cuadrados (2,7 millones de millas cuadradas). El lunes tenía programada una reunión con representantes de los gobiernos de Noruega y Alemania, dos de los principales contribuyentes del fondo.
Salles afirmó que su agencia revisó 103 contratos otorgados por el fondo a grupos sin fines de lucro, alrededor de una tercera parte de los que se han firmado desde el lanzamiento de la iniciativa en 2008. Dijo que la pesquisa encontró “irregularidades” en los 103 acuerdos, pero se negó a dar detalles específicos, alegando cláusulas de confidencialidad hasta que sean auditados.
Entrevistado por Globo TV antes de su reunión del lunes, Salles reiteró su intención de reformar el fondo y establecer reglas más estrictas, así como supervisar la asignación de contratos y los proyectos elegibles para recibir fondos.
“Queremos mejores resultados para revertir el incremento en la deforestación”, dijo Salles, quien agregó que quería resultados “medibles” y que “las inversiones sean redituables”.
Salles dijo que no podía dar más detalles sobre los cambios propuestos por su ministerio hasta discutirlos con Noruega y Alemania. La compañía petrolera estatal brasileña Petrobras es el tercer mayor contribuyente del fondo.
El fondo se creó para recibir donaciones para ayudar a evitar, monitorear y combatir la deforestación en la selva amazónica, una zona vasta y rica en biodiversidad, y cuya preservación es esencial para combatir al cambio climático.