Experta en derechos humanos reprueba políticas de Hungría
BUDAPEST, Hungría (AP) — Hungría debe corregir con urgencia violaciones de derechos humanos como la detención de solicitantes de asilo y la intimidación de grupos civiles, así como preocupaciones sobre la independencia judicial, según dijo el martes la comisaria de derechos humanos del Consejo de Europa.
La comisaria, Dunja Mijatovic, que visitó Hungría en febrero, también determinó que el país está “retrocediendo en igualdad de género”, señalando que hay menos mujeres en política y el gobierno sigue resistiéndose a ratificar la Convención de Estambul sobre la lucha y prevención de la violencia contra las mujeres.
“Las violaciones de derechos humanos en Hungría tienen un efecto negativo en todo el sistema de protección y el Estado de Derecho”, dijo Mijatovic en el reporte. “Deben abordarse de forma urgente”.
En una extensa respuesta al reporte, el gobierno húngaro rechazó las críticas en todos los campos y, por ejemplo, dijo que estaba “absolutamente justificada” mantener las medidas de crisis relacionadas con la inmigración masiva aunque ya casi no lleguen migrantes a Hungría, porque aún quedan muchos en países cercanos como Serbia y Macedonia del Norte.
En relación a los solicitantes de asilo, Mijatovic condenó su detención en zonas de tránsito en la frontera y dijo que Budapest debe revocar las enmiendas legales que, por ejemplo, hacen casi imposible la llegada de solicitantes de asilo desde Serbia, un país al que Hungría considera seguro para los refugiados pese a las preocupaciones de la comunidad internacional.
“También me preocupan sobremanera los reiterados reportes de uso excesivo de violencia por parte de la policía durante expulsiones forzosas de ciudadanos extranjeros”, escribió la comisaria.
Sobre las supuestas golpizas de la policía a migrantes, el gobierno dijo que se han investigado las acusaciones a pesar de que los que reportaron los abusos no presentaron denuncias formales.
“Las grabaciones muestran que el uso de medidas policiales y medidas coercitivas es legal, profesional y justificado”, afirmó el gobierno. “Sin embargo, se perciben como abusos de la policía”.
El primer ministro, Viktor Orban, fue elegido en abril de 2018 para un tercer mandato consecutivo tras una campaña basada casi en exclusiva en políticas antiinmigración, que según dijo pretenden proteger a Hungría y Europa de la “invasión musulmana”.