Oficina: Plan de Trump sobre medicinas incrementaría costos
WASHINGTON (AP) — El plan del gobierno de Donald Trump para disminuir el impacto financiero de los precios de los fármacos que requieren receta médica le costará a los contribuyentes otros 177.000 mil dólares durante 10 años, dijeron el jueves expertos presupuestales legislativos.
Los cálculos de la Oficina de Asuntos Presupuestarios (CBO, por sus siglas en inglés), un organismo apartidista, podrían afectar las perspectivas para una de las propuestas centrales del gobierno con el fin de hacer que las medicinas que requieren receta sean más accesibles a los pacientes. El presidente Donald Trump y destacados legisladores de ambos partidos desean actuar antes de los comicios de 2020.
El gobierno de Trump disputó la conclusión de la oficina presupuestal, diciendo que la regulación que propuso para los precios de los fármacos debería generar ahorros.
Como parte del plan del gobierno, los reembolsos parciales que las farmacéuticas pagan actualmente a las aseguradoras y sus intermediarios irían en su lugar directamente a los adultos mayores en el programa Parte D del Medicare cuando presenten sus recetas.
Los reembolsos parciales son una parte del complejo mundo de los precios de los fármacos que en gran medida pasa desapercibida.
Las farmacéuticas erogan ese dinero en parte para lograr que sus medicinas sean colocadas en un sitio favorable entre los fármacos cubiertos por un plan de salud. Las aseguradoras dicen que dichos reembolsos ayudan a evitar que los precios de las primas se eleven. Pero cuando los pacientes acuden a que les surtan sus recetas, usualmente sus copagos se calculan con base en el precio de lista de los medicamentos, no en el precio de descuento después del pago de los reembolsos.
El otorgarle los descuentos directamente a los pacientes reduciría los copagos para muchos beneficiarios del Medicare.
Pero la CBO concluyó que es improbable que las farmacéuticas reduzcan los precios de lista en forma generalizada en respuesta al plan del gobierno. En lugar de ello, le reembolsarían a las farmacias por los descuentos proporcionados a los adultos mayores cuando presentan sus recetas.
La oficina presupuestal indicó que el resultado final sería un incremento en las primas, cuyo costo se lo dividen el gobierno y los adultos mayores. Como el gobierno subsidia aproximadamente el 75% del costo, eso añadiría 170.000 millones de dólares a los gastos del programa de 2020 a 2029. Los gastos en el Medicaid _el programa gubernamental de apoyo médico a los pobres_ también se incrementarían en unos 7.000 millones de dólares.
“Algunos beneficiarios pagarían precios más bajos en sus fármacos que requieren receta, y para algunos beneficiarios, esas reducciones serían mayores que los incrementos en sus primas”, señaló la CBO en su análisis. “Para otros beneficiarios _a saber los que usan pocas medicinas o fármacos sin reembolsos parciales significativos_ el incremento de la prima sería superior a las reducciones en los precios”.
Pero la CBO dijo que los adultos mayores que no pueden permitirse hacer sus copagos resultarían beneficiados claramente. Podrían tener mayor capacidad de seguir tomando sus medicinas, y eso podría reducir los gastos hospitalarios y de pacientes externos del Medicare en aproximadamente 20.000 millones de dólares durante 10 años.
En respuesta a la oficina presupuestal, el Departamento de Salud y Servicios Humanos afirmó en un comunicado: “El beneficio de la Parte D es muy competitivo. Como tal, estamos de acuerdo (con otros expertos) que consideran improbable que los planes de la Parte D incrementarían muchísimo las primas y le permitirían a los fabricantes aumentar sus precios o retener los reembolsos parciales que pagan en la actualidad”.