Césped de estadio en riesgo, a 2 meses de la Copa América
A dos meses del comienzo de la Copa América en Brasil, un hongo ha dañado el césped en un estadio que albergará tres partidos relevantes.
El problema en la Arena Corinthians de Sao Paulo se deriva de una competición de camiones con ruedas gigantescas que se realizó aquí en diciembre, comentaron ejecutivos del inmueble.
Una lona de plástico colocada sobre el pasto durante ese evento generó condiciones de humedad que lo afectaron.
Desde enero, jugadores y técnicos se han quejado de que hay demasiada arena y de que el césped está dañado en el estadio, con capacidad para 40.000 espectadores, que albergó el partido inaugural de la Copa del Mundo de 2014. Funcionarios han prometido reemplazar la superficie a tiempo para la Copa América.
Andrés Sánchez, presidente de Corinthians, dijo que el estadio cerrará sus puertas después del 21 de abril, cuando se dispute la final del campeonato paulista. La colocación del nuevo pasto llevará un mes, y el Corinthians no jugará ahí sino hasta que haya concluido la Copa América, dijo Sánchez.
“No estamos cerrando por la Copa América, sino por el Corinthians”, dijo Sánchez a un grupo de periodistas. “Desafortunadamente, después de que vinieron los camiones esto empeoró, y no pudimos recuperar la cancha. Debimos haber dejado de jugar ahí en el comienzo del año. Cometimos un error y ahora haremos lo que sea necesario”.
Los organizadores del espectáculo de camiones no respondieron a una petición de declaraciones que les envió The Associated Press.
La Arena Corinthians será sede del encuentro de la fase de grupos del 22 de junio, entre Brasil y Perú, seguido por un duelo de cuartos de final en el que bien podría aparecer la Argentina de Lionel Messi seis días después. El último encuentro en el recinto será el 6 de julio, para definir el tercer puesto.
Los organizadores de la Copa América consideran que la decisión de Corinthians no tendrá un impacto sobre el certamen, y monitorearán la colocación del césped. Pero deberían estar preocupados, a juzgar por algunos antecedentes.
Antes del Mundial de 2014, hubo varios retrasos y dificultades en los preparativos, incluido un accidente que mató a dos trabajadores. Y el inmueble no quedó concluido para el partido inaugural entre Brasil y Croacia.
No se esperaba usar la Arena Corinthians durante la Copa América. El estadio del Palmeiras, Allianz Parque, fue elegido originalmente para albergar los tres partidos, pero un desacuerdo entre organizadores del torneo y operadores de ese estadio llevó a que la Conmebol anunciara el cambio en noviembre.
El Maracaná de Río de Janeiro, donde se jugará la final del 7 de julio, ha pasado también por varios problemas.
Sede histórica de dos finales mundialistas, el estadio está en medio de una batalla legal entre la compañía que lo operaba hasta fechas recientes, el gobierno de Río de Janeiro y los clubes locales Flamengo, Fluminense y Vasco da Gama.
Wilson Witzel, gobernador de Río, canceló el acuerdo con los operadores, encabezados por la cuestionada constructora Odebrecht, y ofreció un nuevo convenio a Flamengo y Fluminense para el recinto con capacidad de 87 mil aficionados.
Los operadores anteriores han advertido con acciones legales.
Ejecutivos de Vasco se han negado a pagar al Maracaná bajo el nuevo acuerdo, que llevaría también a decisiones judiciales impredecibles.
El anfitrión Brasil enfrentará a Bolivia para inaugurar el torneo el 14 de junio, en el Morumbí de Sao Paulo.
Habrá también cotejos en el Mineirão de Belo Horizonte, la Arena do Gremio en Porto Alegre y la Fonte Nova de Salvador. No se debió edificar ningún nuevo estadio para el torneo.