Activistas: el “régimen” mató a 16 tras marcha de al-Bashir
EL CAIRO (AP) — Dieciséis personas, incluyendo un soldado, murieron desde que el ejército de Sudán forzó la renuncia del presidente, Omar al-Bashir, el jueves tras meses de protestas, dijeron activistas el sábado.
El Comité de Médicos de Sudán, afiliado al colectivo que encabezó las protestas, la Asociación de Profesionales Sudaneses, explicó que 13 personas fueron baleadas el jueves y otras tres, entre las que había un miembro de las fuerzas armadas, perdieron la vida el viernes.
Según el grupo, murieron “a manos de las fuerzas del régimen y de sus milicias en la sombra”.
La policía sudanesa reportó el viernes en la noche que 16 personas murieron por “balas perdidas” y al menos 20 resultaron heridas en concentraciones y sentadas en todo el país.
Las fuerzas armadas derrocaron a al-Bashir el jueves, tras casi cuatro meses de protestas que exigían el fin de su régimen de casi tres décadas. Funcionarios militares dicen que está bajo arresto domiciliario en Jartum, la capital, y lo juzgarán las cortes del país, aunque no han aclarado cuáles son los delitos que se le atribuyen.
La Corte Penal Internacional de La Haya quiere juzgarlo por crímenes de genocidio derivados de la guerra en la región de Darfur durante la primera década del siglo.
Los manifestantes han dicho que permanecerán en las calles hasta que se forme un consejo civil de transición. Temen que los militares, comandados por leales al régimen, gobiernen por tiempo indeterminado o entreguen el poder a uno de los suyos.
El general Abdel-Fattah Burhan prestó juramento el viernes como jefe de un consejo de transición militar que dice que gobernará durante un máximo de dos años, hasta realizar elecciones. Burhan, que fue inspector general de las fuerzas armadas, se reunió con los manifestantes en la calle tras la caída de al-Bashir y escuchó sus reclamos.
Reemplazó al general Awad ibn Ouf, el ministro de Defensa que había anunciado la destitución de al-Bashir. In Ouf renunció como líder transicional ante las protestas de los manifestantes, quienes decían que estaba demasiado vinculado con el líder depuesto.