México nombra jefe de la Guardia Nacional
CIUDAD DE MÉXICO (AP) — El presidente Andrés Manuel López Obrador nombró el jueves a un general del ejército que participó en la guerra contra las drogas para que encabece la recién formada Guardia Nacional.
El general Luis Rodríguez Bucio, de 62 años, asumirá el cargo inmediatamente. Indicó que está en proceso de retirarse del ejército.
En diciembre, López Obrador dijo al asumir el cargo que quería apuntar a las raíces de la violencia creciente en lugar de perseguir a los capos del narcotráfico, como hicieron gobiernos anteriores. Repitió lo mismo el jueves, y añadió que tenía la responsabilidad de garantizar la seguridad del pueblo.
López Obrador ha forjado una relación estrecha con las fuerzas armadas, primero al emplearlas para perseguir a las bandas de ladrones de combustibles y ahora al crear la nueva fuerza de seguridad, que dice es necesaria para controlar la violencia.
Los críticos de la nueva fuerza han dicho que está demasiado ligada a las fuerzas armadas, aunque López Obrador dice que eso es crucial para su efectividad. En un principio la Guardia Nacional va a estar formada por la policía militar y miembros de la policía federal.
Otro general y un almirante retirado formarán el organismo coordinador operativo de la Guardia Nacional, junto con un comisionado de la policía federal.
Rodríguez Bucio es un veterano y estudioso de la guerra contra los cárteles de la droga, a los que ha combatido en los estados norteños de Tamaulipas, Nuevo León y Chihuahua, así como los de Sinaloa y Durango, en el oeste.
Durante el gobierno del presidente Felipe Calderón _quien lanzó la guerra frontal contra los cárteles_, Rodríguez fue uno de los jefes del grupo de análisis del narcotráfico del Estado Mayor. En la década de 1990 colaboró estrechamente con la inteligencia interior.
En los últimos años ha participado en investigaciones sobre la estrategia contra el narcotráfico. Cuando estudiaba para su doctorado en defensa y seguridad nacional, escribió una tesis sobre el papel de las fuerzas armadas en la guerra contra las drogas en el gobierno de Calderón.
Más recientemente, presidió la Junta Interamericana de Defensa en Washington, que brinda asesoría técnica a la Organización de los Estados Americanos.
A la larga la Guardia Nacional estará bajo la autoridad civil del secretario de Seguridad Pública, Alfonso Durazo.
Sin embargo, el analista de seguridad Alejandro Hope dijo que el hecho de que Rodríguez Bucio siga siendo un militar activo crea una cadena de mando paralela. Aunque el funcionario responde a Durazo, como general seguirá bajo la cadena de mando del ejército y responderá a sus superiores.
“Siento que esto nulifica a Durazo”, dijo Hope. La forma en que funcionará la relación entre Durazo y el organismo coordinador de la Guardia Nacional sigue siendo una incógnita, ya que es necesario que se aprueben leyes adicionales.
El año pasado, México registró el mayor número de asesinatos en al menos 20 años. Los grupos defensores de los derechos humanos esperaban que el nuevo gobierno redujera el papel de los militares en la seguridad interior, y desde hace años se multiplican las presiones para que el país reforme a sus policías y devuelva a los soldados a los cuarteles, pero los intentos de reforma policial se estancaron y López Obrador decidió partir de cero.
El presidente ha prometido que el respeto a los derechos humanos será una de sus prioridades.