Argentina: Lavagna se considera la alternativa electoral
BUENOS AIRES (AP) El economista Roberto Lavagna se considera el líder de una alternativa política superadora al ajuste que representa el presidente Mauricio Macri y el populismo que encarna la exmandataria Cristina Fernández para las elecciones de octubre en Argentina.
Lavagna, de 77 años, dijo el martes a corresponsales extranjeros que está en pleno proceso de construcción de una alternativa política que escape a los dos extremos que dominaron el escenario político en los últimos ocho años al percibir que cada vez más argentinos demandan fórmulas distintas para salir de la recesión.
Lavagna, que encabezó el Ministerio de Economía de forma exitosa durante varios años de crecimiento del mandato del peronista Néstor Kirchner (2003-2007), carece de una estructura partidaria pero espera recabar el apoyo de fuerzas diversas como el peronismo moderado, el radicalismo y el socialismo en busca de un consenso del que participen dirigentes sindicales y empresariales.
El exministro -que consiguió impulsar la recuperación económica de Argentina cuando el país sufría en 2002 la peor crisis que se recuerde- tiene plazo hasta junio para oficializar su candidatura presidencial. En las últimas semanas ha intensificado los encuentros con distintos dirigentes políticos para terminar de dar forma a su proyecto.
Una de las propuestas que defiende es escapar de las políticas de permanente intervención del Estado en la economía que aplicó Fernández (2007-2015) y el ajuste defendido por Macri, quien sostiene que ese es el camino adecuado para reordenar la economía. Para sus críticos, sin embargo, los recortes, despidos y suba de tarifas aplicados por Macri para reducir el déficit fiscal no han hecho más que profundizar la pobreza, que afecta a 32% de la población.
Cuando a una economía que está en recesión se le promete más ajuste... me hace acordar mucho a los médicos de la Edad Media que sangraban al enfermo. ¿Se acuerdan cuando le ponían las sanguijuelas? Es más o menos lo mismo, sostuvo Lavagna, quien se considera un exponente del centro progresismo.
El economista indicó que el camino trazado por el presidente no parece el idóneo cuando durante su mandato hubo tres años de caída de la actividad económica.
Macri ha anunciado que buscará la reelección en octubre y, aunque no ha oficializado aún si será candidata, Fernández es la dirigente opositora con más posibilidades de arrebatarle el poder. Pero ninguno de los dos tendría votos suficientes para imponerse en una primera vuelta, según distintos sondeos privados que les dan una intención de voto pareja de alrededor de 30%.
En una primera vuelta, el ganador debe conseguir 45% de votos o 40% y una diferencia de al menos 10 puntos porcentuales sobre el segundo.
Lavagna asoma cada vez con más fuerza como el tercero en discordia dado el creciente apoyo que cosecha en algunas encuestas. En algunas aparece como ganador en una eventual segunda vuelta si sus rivales fueran Macri o Fernández. Un sondeo de la consultora Management & Fit señala que el economista es el dirigente con mejor imagen y los analistas consideran que es el que tiene mayor margen para incrementar su caudal de votos.
El descontento con Macri ha ido en aumento debido al derrumbe de 2,6% de la economía en 2018 y los pronósticos negativos para este año. A ello se suma una inflación anual el año pasado de 47,6% que está resultando muy difícil reducir.
Pese al adverso panorama, el exministro de Economía consideró que su país tiene enormes posibilidades y se mostró partidario de quebrar esa polarización entre Macri y Fernández.
La receta para sacar a Argentina de la recesión en la que está inmersa consiste en movilizar los recursos naturales como el yacimiento de hidrocarburos no convencionales de Vaca Muerta, o mejorar la relación comercial con China, señaló.
También alcanzar el equilibrio fiscal mediante la expansión de la economía, reducir los impuestos al trabajo y a la inversión y recuperar el poder de compra de la población.
Lavagna se mostró crítico con el programa de ajuste aplicado a partir del acuerdo del gobierno con el Fondo Monetario Internacional para conseguir un préstamo de unos 56.300 millones de dólares concedido en medio de una fuerte devaluación del peso en 2018.
Pero aclaró que ese acuerdo debe ser respetado, aunque sería necesario realizar sucesivos procesos de negociación para hacer viable que Argentina cumpla con todos sus compromisos que acumulados como están hoy son muy difíciles.
Al respecto resaltó que habrá que reprogramar vencimientos por 43.000 millones de dólares en 2021 y 2022.
Para ello, dijo, la solución no es el ajuste permanente sino -como hizo el gobierno en el que participó en 2002, - movilizar los recursos que están disponibles para expandir la economía.
Lavagna, que ha integrado gobiernos peronistas y de la Unión Cívica Radical, dejó el gobierno de Kirchner en medio de disidencias con el entonces presidente sobre algunas políticas económicas que durante el posterior mandato de su esposa Fernández se tornaron más intervencionistas.