México: Hallan posibles restos de una vaquita marina
CIUDAD DE MÉXICO (AP) La organización ambientalista Sea Shepherd dijo el jueves que halló el cadáver de lo que parecía ser una vaquita marina, una de quizás 10 ejemplares que quedan en el mundo.
Los restos estaban bastante descompuestos como para ser identificados de inmediato, señaló, y añadió que fueron entregados a las autoridades para que los analizaran.
Dos botes patrulla de Sea Shepherd hallaron al animal el martes en una red de pesca en el Golfo de California, el único lugar donde vive el mamífero en peligro de extinción. El grupo vigila el golfo, también conocido como el Mar de Cortés, y retira las redes de pesca ilegal.
Las vaquitas marinas se enredan en redes colocadas para la pesca de totoaba, cuya vejiga natatoria es considerada un manjar en China.
En un reporte publicado hace unos días, una comisión internacional de expertos calculó que sólo quedan vivas entre seis y 22 vaquitas marinas.
La cifra más baja representa el número de vaquitas que se avistaron en la superficie durante un viaje de los investigadores hace unos meses. La cantidad más alta fue el número de ejemplares que se podrían haber sido escuchados en un sistema de monitores acústicos flotantes.
La comisión dijo que la cantidad más probable de estas marsopas restantes sea de aproximadamente 10.
Las vaquitas marinas están concentradas en un área cada vez más pequeña de unos 24 por 12 kilómetros (15 por 7,4 millas), señaló el reporte.
Las pocas vaquitas que quedan habitan una zona muy pequeña, de aproximadamente 24 por 12 kilómetros, de los cuales gran parte se encuentra en el refugio de las vaquitas. Sin embargo, en esta zona se producen los altos niveles de pesca ilegal de totoaba, agregó el reporte.
Defender a las vaquitas en la zona no debería ser una labor imposible, debido a que el área que debe protegerse no es grande, se agregó en el reporte.
Sin embargo, las embarcaciones de Sea Shepherd han sido objeto de hostigamiento y ataques cada vez más frecuentes en los últimos meses. Y la temporada de pesca de totoaba, en la que los peces grandes se reúnen para reproducirse, alcanzará su punto máximo entre estos días y mayo.
La audacia de los pescadores ilegales, el pequeño número de vaquitas restantes y la incapacidad de la Marina y de las autoridades mexicanas para detener la caza furtiva ha preocupado a los ambientalistas, quienes temen que el mamífero marino se extinga pronto.
Los reportes de la región dejan entrever que la pesca ilegal está aumentando, y ha habido varios episodios recientes de violencia por parte de los pescadores ilegales contra las embarcaciones que retiran las redes y sus tripulaciones, a otros pescadores legales, y hasta contra la Marina mexicana, señaló la comisión en su reporte.
Estos eventos ilustran las continuas fallas de los esfuerzos de las autoridades y la falta de respeto hacia la ley mexicana por parte de los pescadores, agregó.
En el último intento para salvar a la vaquita, la comisión exhortó al gobierno mexicano a proporcionar una vigilancia y patrullajes de 24 horas en la pequeña zona donde habitan y tomar todas las medidas necesarias para proteger a los equipos que retiran las redes.
Sólo queda una mínima esperanza para la vaquita, dijo Kate OConnell, consultora de vida marina para el Instituto de Bienestar Animal. México debe actuar con determinación para garantizar que toda la pesca con redes agalleras se acabe en la parte superior del golfo.