Tom Ford viaja a los 70 en Nueva York
NUEVA YORK (AP) — Tom Ford dice que la época turbulenta en la que vivimos lo llevó a ver en la dirección contraria en la Semana de la Moda de Nueva York, donde presentó el miércoles una colección de siluetas sencillas, elegancia no agresiva y con un poco de color inspirado en Los Ángeles.
Ford dejó sentir una vibra distintiva de los años 70 con fedoras de imitación de piel con ala ancha y abrigos de piel extragrandes.
Pero no se equivoquen: la atención al detalle del diseñador quedó de manifiesto. Algunos estilos para el otoño-invierno fueron demarcados con seda y detalles hechos a mano para lograr su toque usual de lujo.
Desde que dejó Londres por Los Ángeles hace casi dos años, Ford ha vuelto a adoptar el uso del color, pero en esta ocasión lo incluyó en tonalidades difuminadas de azul y gris claro, ciruela, caramelo, rosado, marrón y vino.
“Mi aceptación de ciertos colores ha cambiado”, dijo en una entrevista tras bambalinas luego del desfile.
Ford también tenía en mente el uso del color en el siglo XVIII, así como el toque del diseñador estadounidense Charles James. Su mezcla de rojos y rosas evocó el trabajo de Yves St. Laurent, una casa de la que fue alguna vez director creativo.
En el primer día de la Semana de la Moda, Ford dijo que el clima político actual influyó en su colección.
“Me siento agitado y molesto y creo que la ropa ahora no debería ser agresiva, y eso suena raro viniendo de mí porque lo que he hecho suele ser agresivo, ropa dura. Quería que fuera simplemente hermosa”, dijo.
Ford hizo definitivamente referencia a sus propias raíces en el diseño, tras haberse hecho de una reputación en Gucci con pantalones y camisetas (pantalones entubados y ceñidos con chaquetas igualmente definidas), vestidos blancos en jersey y trajes de terciopelo.
“Eso es porque ese soy yo, eso es lo que me gusta”, dijo Ford. “En algún momento llegas a cierta edad y dices, este es mi estilo. Es lo es lo que me gusta y esto es lo que debería hacer”.
Ford diseña para clientes maduros específicos, damas y caballeros con lujos y elegancia, así como un poco de arrojo. Quizá a ellos les gusten los artículos de pieles y cuero, pero Ford se apegó a su promesa de tener cuidado con esos materiales, apegándose a productos secundarios de animales destinados a la alimentación para las piezas de lana y los trajes de piel para caballero.
Ford se debate entre el uso de piel falsa y real, al detallar los niveles de biodegradabilidad y cuántos años pasa un producto en circulación antes de ser desechado.
"Estoy bastante indeciso al respecto”, dijo el diseñador. “La piel real se biodegrada en seis meses, la piel falsa contamina el ambiente al ser fabricada y no se biodegrada en 100 años, así que no sé”.
Al respecto de los grandes sombreros, algunos dorados y plateados, que no suele hacer, comentó:
"He estado pasando más tiempo en Nueva York, en secreto, y cuando estás en Nueva York en invierno piensas ‘está lloviendo, está nevando o está muy frío’. Definitivamente puedo ver un sombrero en la calle”, dijo. “En el mundo actual (los sombreros) no tienen mucho sentido”.
Pero cuidado con decir que estos sombreros son para un proxeneta de los 70 (la música que Ford escogió para el desfile incluyó "Stayin' Alive" de los Bee Gees). Más bien estaba pensando en Diana Ross en la película de 1976 "Mahogany" y Beyonce en "Dream Girls".
Tras 35 años en la industria de la moda y 35 de influencias circulando por su mente, Ford dice que es difícil decir de dónde salen estas cosas.
“Uno construye un gabinete de archivos, un disco duro de imágenes y cosas y entonces cuando diseñas tomas aspectos de ellas y después no necesariamente ves de dónde vinieron porque simplemente se convierten en referencias pasadas”.