Kihuen vuelve a la política a pesar de denuncias de acoso
LAS VEGAS (AP) — El ex representante nacional Rubén Kihuen, cuyo meteórico ascenso en el Partido Demócrata fue frenado en seco por denuncias de acoso sexual, decidió volver a la política postulándose para una banca en el Concejo Municipal de Las Vegas a pesar de la oposición de viejos partidarios suyos que creen que no merece esa plaza.
Kihuen se inscribió en la contienda el miércoles, pocas semanas después de completar su primer mandato en el Congreso sin buscar la reelección.
“A menos que recuperes la confianza de la gente, que es algo que toma tiempo, no mereces representarla”, expresó María Teresa Libermann, directora del PAC No Meand No, Ruben (No quiere decir no, Rubén), un comité de acción política que quiere evitar que acceda al Concejo.
Kihuen fue uno de media docena de legisladores que renunciaron, se retiraron o no buscaron la reelección a fines del 2017, tras ser blanco de denuncias de acoso sexual en medio del fervor generado por el movimiento #yotambién (#MeToo).
El político no respondió a varias llamadas telefónicas y correos electrónicos para hablar sobre su campaña.
En declaraciones al diario Las Vegas-Review-Journal dijo que ya había ofrecido disculpas y que sólo le habían hecho un llamado de atención, sin aplicarle castigo formal alguno, en la comisión de ética de la Cámara de Representantes.
“Ofrecí una disculpa sincera, sin excusas, el año pasado y me hicieron un ‘reproche’, que es la medida más liviana que puede tomar el Congreso”, destacó Kihuen.
La comisión de ética concluyó que Kihuen hizo persistentes comentarios inapropiados a tres mujeres que debían tratar con él por cuestiones laborales.
El informe incluyó mensajes llenos de emojis que Kihuen le envió a una cabildera entre el 2014 y el 2015, en los que le decía que quería salir con ella. En uno, tras una enésima negativa de parte de la mujer, Kihuenle respondió “jajaja... ¿Cuántas veces me has dicho que no? ¡Como 4.456.221 veces!”.
Kihuen dijo que lamentaba su conducta, pero que nunca incurrió intencionalmente en acciones que podían ser interpretadas como acoso.
Para algunos demócratas y activistas progresistas, incluidas mujeres que ayudaron a que en Nevada se eligiese el año pasado la primera legislatura con mayoría femenina, la disculpa no basta.
NARAL Pro-Choice Nevada dijo que Kihuen debe retirarse de la contienda, aduciendo que su campaña “ignora por completo la salud y la seguridad de las mujeres de Nevada”.
El gobernador Steve Sisolak, quien hace poco creó una fuerza de tareas abocada al acoso sexual, dijo que se sentía “sorprendido y decepcionado” por la decisión de Kihuen. “Me preocupa mucho el que la insistencia del señor Kihuen en mantenerse en el candelero obligue a las mujeres de las que abusó a volver a vivir su trauma”, declaró el dirigente demócrata en un comunicado.
Otros demócratas prominentes del estado han guardado silencio.
Kihuen fue el primer hispano que Nevada manda a la Cámara de Representantes de la nación en el 2016. Tuvo el apoyo clave del ex senador Harry Reid y del poderoso Sindicato de Trabajadores Culinarios-Local 226, que representa a los empleados de los casinos.
Ni Reid ni el sindicado quisieron hacer comentarios.
La activista Libermann dijo que llegó a admirar a Kihuen por su condición de hispano que se abre paso en la política, pero que le molestó mucho lo que describió como una “disculpa a medias”.
Indicó que Kihuen podría ganar la elección porque es muy conocido y sigue siendo popular entre los hispanos, que constituyen el 65% de su distrito.
Hay otros cinco candidatos a una plaza no partidista.
Una de ellas, Melissa Clary, dice que se enfocará en sus méritos personales y en los temas que hay que abordar, no en las denuncias de acoso.
Olivia Díaz manifestó igualmente que no piensa tocar el tema. “El electorado tendrá que decidir quién quiere que lo represente”, señaló.