Juez: EEUU no puede deportar a hondureña sin su hija
HOUSTON (AP) — Un juez federal le ordenó el lunes al gobierno de Estados Unidos que no deporte a una mujer hondureña sin su hija de 15 años.
El juez de distrito Randolph Moss emitió el interdicto a pedido de los abogados de ella. La madre teme que el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE por sus siglas en inglés) la deporte antes de que pueda apelar su caso y se vea obligada a dejar a su hija menor de edad bajo custodia del gobierno.
Madre e hija dicen que llegaron a Estados Unidos hace dos años luego que pandilleros en Honduras les apuntaron con pistolas y les exigieron dinero a cambio de protección.
Ambas se encuentran en un centro de detención para familias en Dilley, en el sur de Texas. Mientras la joven tiene pendiente su solicitud de asilo, el viernes un juez de inmigración negó el pedido de la madre de reabrir su proceso migratorio.
Shalyn Fluharty, abogada de la madre y la hija, dijo que la joven ha tratado de suicidarse por lo menos una vez en el centro de detención y por lo tanto necesita a su mamá.
“Su bienestar psicológico se encuentra en estado crítico”, dijo Fluharty.
En un inicio, a las dos se les permitió salir del centro de detención mientras sus casos migratorios procedían, pero el ICE las detuvo en junio. La semana pasada la joven cumplió 15 años.
El ICE utiliza el centro de detención en Dilley, que tiene capacidad para 2.400 personas, para mantener juntas a madres e hijas. Fluharty dijo que no sabe de nadie que hubiera estado detenido en este lugar durante seis meses. El Acuerdo Flores impide la detención prolongada de migrantes menores de edad.
Fluharty dijo que ambas temen que la menor sea atacada sexualmente o asesinada si regresan a Honduras.
Pero si la madre es deportada y la hija se queda en Estados Unidos, es probable que la niña sea colocada en una instalación del gobierno para menores migrantes que están solos. Eso es lo que ocurrió hace unos meses cuando cientos de niños se quedaron solos después de que sus padres fueron deportados al amparo de una política migratoria de tolerancia cero que llevó a la separación de familias a gran escala.
Hasta la semana pasada, más de 14.000 menores estaban bajo custodia del gobierno, muchos de ellos en centros atestados que pediatras y expertos en salud mental consideran inapropiados.
El senador Jeff Merkley, demócrata de Oregon, se reunió con la madre durante una visita a Dilley y cuestionó si el gobierno está usando la deportación como amenaza para que la joven ceda en su solicitud de asilo.
“Esta es una forma de presión psicológica”, dijo Merkley el lunes.
Fluharty dijo que planea apelar el caso de la madre el miércoles, pasando Navidad. No queda claro si las cortes de migración abrirán debido al cierre parcial del gobierno que comenzó el sábado.
Una portavoz del ICE dijo que la agencia no podía comentar sobre el caso debido al cierre de operaciones del gobierno.