Políticos catalanes encarcelados hablan antes de su juicio
SANT JOAN DE VILATORRADA, España (AP) — Al comenzar la tercera semana de una huelga de hambre de políticos independentistas catalanes encarcelados que ya comienza a afectarles la salud, estos dijeron que su inminente juicio por rebelión les permitirá promover pacíficamente su causa para separarse de España.
En inusuales entrevistas concedidas desde un penal al norte de Barcelona, Jordi Sánchez y Jordi Turull, quien está en la enfermería desde el viernes, repitieron sus llamados al diálogo entre el gobierno de Cataluña y el central en Madrid y rechazaron que se diga que el movimiento independentista de esa próspera región del noreste de España es violento.
Sánchez, un activista reconvertido en político, dijo a The Associated Press que su juicio, que está previsto que comience a principios del año próximo, será “un momento único para denunciar la actitud del Reino de España contraria a los derechos políticos y democráticos en Cataluña”.
“No lo vamos a desaprovechar”, agregó.
Según las autoridades españolas, los 22 acusados están siendo procesados no por sus ideas, sino por desafiar órdenes judiciales al efectuar un referendo prohibido sobre la independencia en Cataluña el año pasado y realizar un intento ilegal para independizar a la región.
Algunos de ellos han sido encausados por cargos de rebelión o sedición, y enfrentan condenas de décadas en la cárcel en lo que la prensa local ha apodado “el juicio del siglo” en el Tribunal Supremo. El martes se llevará a cabo una audiencia preliminar, aunque no se prevé que los demandados se presenten en la corte sino semanas después.
El referendo prohibido por la independencia de Cataluña en 2017, la violenta represión de España para detenerlo y la subsecuente declaración de independencia por parte de las autoridades catalanas derivaron en que las autoridades centrales en Madrid tomaran el control de la región de 7,4 millones de habitantes durante siete meses, una medida sin precedentes.
Más de un año después, la conmoción por el movimiento secesionista catalán todavía se siente en España. Crece la división política entre lo catalán y el nacionalismo español, un desarrollo que ha impulsado el auge de un partido populista de la extrema derecha que recientemente ganó una docena de escaños en el parlamento regional de Andalucía.
Sánchez estaba vestido con tres capas de ropa a pesar de la calefacción normal en la prisión moderna operada por el gobierno catalán. Su médico dijo que el frío constante es el resultado de no consumir calorías y agregó que el político de 54 años ha perdido más de 5 kilos (11 libras) desde que comenzó con el ayuno el 1 de diciembre.
Turull, un excandidato para jefe de la región, fue enviado a la enfermería de la prisión Lledoners el viernes porque sus riñones se vieron afectados después de perder 6 kilos (13 libras) en dos semanas. Engaña al cuerpo con nicotina para ignorar el hambre.
Otros dos miembros del gabinete catalán también se sumaron a la huelga de hambre el 3 de diciembre, pero otros reclusos de un grupo político separatista rival, entre ellos el exvicepresidente catalán Oriol Junqueras, han optado por no unirse, lo que también expone las diferentes estrategias dentro del movimiento independentista.
Turull dijo que su protesta viene con un “profundo sentimiento de la responsabilidad” y que no piensa morirse de hambre.
“El final dependerá de ver lo que las fuerzas nos permiten y de nuestro objetivo de llamar la atención al problema que tiene España con la justicia”, dijo el abogado de 52 años.
Su objetivo es presionar al Tribunal Constitucional de España para que falle en las apelaciones sobre sus derechos políticos y sus prolongados encierros previos al juicio. Los huelguistas creen que el tribunal intenta deliberadamente bloquearles la llegada al Tribunal Europeo de Derechos Humanos en Estrasburgo, donde esperan exponer las deficiencias judiciales que ven en casa.
La principal corte española ha comenzado recientemente a emitir algunos fallos en una serie de apelaciones y dice que trabaja tan rápido como se lo permite el calendario judicial para lidiar con “la complejidad de este proceso en el que se integran derechos fundamentales y el análisis de cuestiones de estricta naturaleza penal”.
Las autoridades del centro de España no ven el motivo para una huelga de hambre.
“Las acciones que justifican esa acción no son ciertas. Van a tener un juicio justo”, dijo recientemente el presidente Pedro Sánchez y agregó que su gobierno se niega tanto llevar la política a la corte como “politizar la justicia”.