Corte de oleoducto agudiza conflicto con indígenas en Perú
LIMA (AP) — El corte de un oleoducto clave para la seguridad energética de Perú amenazaba el viernes con agudizar un conflicto que involucraba a indígenas y petroleras además de impactar el medioambiente en una zona de la Amazonía.
Beatriz Alva, gerente de comunicaciones de la estatal Petroperú, culpó en una conferencia de prensa a un grupo de indígenas de una comunidad amazónica llamada Mayuriaga, quienes al parecer cortaron el Oleoducto Nor Peruano a inicios de semana e impedían el viernes detener el derrame de petróleo.
“No nos dejan poner la grapa hasta hoy... el crudo sigue saliendo y sigue impactado el ambiente y eso es algo gravísimo”, dijo la funcionaria.
Un grupo de indígenas que viven en Mayuriaga han protestado sin éxito por los resultados de unos comicios municipales realizados en octubre, por lo que exigen nuevos comicios alegando fraude. The Associated Press no ha podido confirmar de modo independiente quién cortó el ducto que se extiende desde la Amazonía hasta la costa del Pacífico y transcurre a 500 metros de la comunidad donde viven unas 90 familias de la etnia Wampi en extrema pobreza, de acuerdo a datos oficiales.
Víctor Huarcaya, el gerente de seguridad de la petrolera estatal, dijo que estaban a la espera de una autorización de la policía para que un grupo de agentes se transporte por helicópteros hasta la zona del derrame y otorgue seguridad a los trabajadores que buscan sellar el forado que permite la fuga del crudo.
La petrolera estatal no ha podido cuantificar la cantidad de petróleo derramado por el corte del oleoducto, pero proyecta una cifra de alrededor de 8.000 barriles de crudo.
Los desacuerdos de la petrolera estatal con Mayuriaga no son nuevos: en 2016 los indígenas retuvieron a un helicóptero militar en protesta por no ser incluidos dentro de un plan de emergencia ambiental decretado por el gobierno tras un derrame de petróleo que afectó a Mayuriaga provocando a varios niños y adultos diversos síntomas, entre ellos náuseas y dolores de cabeza, de acuerdo a datos de fiscalización ambiental.
La petrolera estatal ha interpuesto cuatro denuncias de diversos grados por el delito de extorsión contra siete comuneros de Mayuriaga y de acuerdo a las leyes peruanas estos delitos se castigan con no menos de diez años de prisión.
La AP buscó comentarios en la mayor organización indígena amazónica de Perú, pero no los pudo obtener al momento.
Alva también indicó que el corte del ducto podría perjudicar desde el sábado a la petrolera canadiense Frontera Energy, que opera el bloque petrolero más grande de Perú y usa el ducto para transportar crudo hasta la costa del Pacífico. Según datos de Petroperú, si se detiene la extracción de petróleo la empresa canadiense podría acumular pérdidas de unos 200.000 dólares diarios.
Los conflictos entre indígenas que viven en condiciones miserables y la petrolera estatal se han acumulado por 41 años desde la construcción del oleoducto y son complejos. Muchos de esos desacuerdos han sido impulsados por derrames petroleros de diversos orígenes y promesas estatales incumplidas. Solo desde 2011 se han producido 44 derrames petroleros, de los cuáles 24 han sido causados de manera intencional, según datos de la autoridad de fiscalización ambiental.