Perú enviará datos a Montevideo por pedido asilo de García
LIMA (AP) — El presidente peruano Martín Vizcarra dijo el lunes que a más tardar el martes se enviará a Montevideo la documentación sobre el caso judicial del exmandatario Alan García, quien el fin de semana ingresó a la embajada de Uruguay en Lima y solicitó asilo.
García alega “persecución política” después de que un juez le prohibió salir de Perú mientras lo investigan por presunta corrupción ligada al caso Odebrecht.
Vizcarra comentó a la prensa en una actividad pública que el domingo conversó con su colega uruguayo Tabaré Vásquez por unos siete minutos comprometiéndose a enviar los documentos requeridos por Uruguay para que pueda tomar “la mejor decisión” respecto al pedido del exmandatario peruano.
Vizcarra, quien ha iniciado una cruzada anticorrupción desde julio luego de un gran escándalo en el sistema judicial peruano, indicó que en su conversación con Vásquez le recordó que en abril, durante la Cumbre de las Américas en la capital peruana, se suscribió el Acuerdo de Lima donde todos los presidentes del continente, incluido Uruguay, “nos comprometimos a luchar contra la corrupción, esa que no conoce fronteras”.
García, de 69 años, permanecía dentro de la embajada de Uruguay en Lima que estaba rodeada de policías antimotines para evitar posibles disturbios en próximas manifestaciones a favor o en contra de uno de los políticos más poderosos de los últimos 30 años.
El prestigio de García ha caído por los suelos en los últimos años. En setiembre una encuesta de la firma Ipsos Perú otorgaba 89% de rechazo a García, quien gobernó Perú en dos ocasiones: 1985-1990 y 2006-2011.
El sábado un juez anticorrupción ordenó el sábado a García permanecer 18 meses en el país luego que la fiscalía decidió ampliar su investigación por los supuestos delitos de lavado de activos y colusión agravada. La fiscalía afirma que el expresidente recibió 100.000 dólares de dinero sucio de Odebrecht, maquillados bajo la apariencia de pagos por una conferencia en Sao Paulo que García realizó en 2012.
El pedido de asilo modificó la manera cómo García enfrentaba las acusaciones de corrupción ligadas a Odebrecht. Antes se mostraba confiado e incluso repetía la frase “otros se venden, yo no” en referencia a mandatarios que están prófugos de la justicia como Alejandro Toledo (2001-2006) o que estuvieron presos por algunos meses como Ollanta Humala (2011-2016). Después que le prohibieron salir del país, el expresidente dijo que obedecería la orden “para que nadie piense que ocultamos algo”.
García es investigado por la construcción de la primera ruta del Metro de Lima culminada en su segundo gobierno (2006-2011), una obra que había empezado en su primer gobierno (1985-1990) y que está plagada de sospechas de corrupción.
Las investigaciones preliminares por presunta corrupción de Odebrecht en Perú también han llevado a prisión a la poderosa lideresa opositora Keiko Fujimori junto a sus principales asesores. En 2016, Odebrecht admitió en un acuerdo con el Departamento de Justicia en Washington que pagó unos 800 millones de dólares en sobornos a políticos de toda Latinoamérica, incluyendo 29 millones de dólares a los gobiernos de Perú.
En 1992 García solicitó otro asilo que fue aceptado e ingresó a la embajada de Colombia en Lima. Retornó a Perú en 2001 cuando los delitos de corrupción por los que se lo investigaban prescribieron.
