Urge a Dolphins tapar huecos en su defensa contra la carrera
DAVIE, Florida, EE.UU. (AP) — La defensiva de los Dolphins de Miami tendrá un aspecto diferente esta semana.
“Me corté el cabello”, anunció el linebacker Raekwon McMillan. “Sólo para sentirme mejor”.
Un cambio es necesario después de una actuación desastrosa la semana pasada en casa. Los Dolphins permitieron 248 yardas por carrera y apenas forzaron un despeje en la derrota por 32-21 con Detroit. Deben reagruparse rápido para el jueves por la noche, cuando jugarán en Houston.
La ofensiva de los Texans (4-3) se ubica entre las 10 mejores, y Houston tiene una racha de cuatro victorias. Eso es un mal presagio para los Dolphins (4-3), que se clasifican como el cuarto peor equipo de la NFL en yardas permitidas por jugada y concedieron siete anotaciones contra los Lions.
“Fue malo”, dijo el entrenador en jefe Adam Gase. “Tenemos que limpiar un montón de cosas. Tenemos que estar en la misma página, y todos necesitan asegurarse de jugar como un grupo. Nos destriparon”.
Pero Gase descartó una sacudida en la alineación.
“No se trata de cambios en la alineación”, sostuvo. “Se trata de que todos estén en la misma página y hagan las cosas correctas para asegurarse que tenemos una oportunidad de detener la carrera”.
La defensiva contra la carrera ha sido un problema recurrente durante los tres años de Gase como entrenador. Durante las últimas 10 semanas de la temporada de 2017, su equipo permitió 127 yardas por juego por la vía terrestre, y ganó sólo dos veces. Incluso en 2016, cuando los Dolphins clasificaron a los playoffs, permitieron más yardas por carrera que otros 29 equipos en la liga.
Esta temporada Miami se ubica como el cuarto peor en yardas terrestres permitidas, y los Lions aprovecharon repetidamente los enormes huecos. Los jugadores de Miami coinciden en que el problema es la falta de concordancia en el campo.
“Simplemente tenemos que estrecharnos, todos en sus trincheras, asegurarnos que estamos firmes, jugando nuestra técnica y no tratando de hacer demasiado, no intentando hacer demasiadas jugadas”, consideró McMillan. “Tenemos que jugar mejor. Esto es todo”.
Otro problema es la presión sobre el quarterback. Los Dolphins apenas tienen 11 capturas, la cuarta menor cantidad en la liga. Los ends Cameron Wake, Robert Quinn y Andre Branch, que atraen mucha atención de los bloqueadores, tienen sólo una captura cada uno.
“Mi trabajo es llegar al quarterback”, aceptó Wake. “Si no lo hago, es un fracaso”.
Los Texans seguro probarán a la defensiva contra la carrera de los Dolphins, ya que Houston es segundo en la NFL en yardas terrestres. La versatilidad del quarterback Deshaun Watson forma parte del reto, como el safety Minkah Fitzpatrick puede confirmar.
Con Alabama, Fitzpatrick jugó contra Watson y Clemson dos años consecutivos en el partido por el campeonato universitario, y lo considera el mejor quarterback que enfrentó como colegial.
“Hizo algunas jugadas increíbles”, señaló Fitzpatrick. “Es un jugador duro. Puede aceptar algunos golpes y lanzar algunos pases sorprendentes. En definitiva va a ser un reto para nosotros”.
Los bonitos cortes de cabello no son suficientes.