Peso baja y surgen dudas tras acuerdo entre FMI y Argentina

BUENOS AIRES (AP) El peso se depreciaba el jueves en Argentina un día después de que el Fondo Monetario Internacional ampliara un acuerdo crediticio para garantizar más recursos financieros, cuya efectividad genera dudas entre analistas.

El dólar cerró en 40,60 pesos por unidad respecto de los 39,20 pesos de la víspera, según el estatal Banco de la Nación Argentina.

La marcada depreciación se produce a días de que el 1 de octubre el Banco Central comience a aplicar una nueva política cambiaria que apunta a mantener la divisa en un valor de entre 34 y 44 pesos por unidad, contemplada en el nuevo acuerdo con el FMI.

El mercado está viendo que este plan tiene muy poca vida y está comprando dólares baratos, dijo a The Associated Press Marcelo Trovato, director del portal sobre productos y servicios financieros pronosticobursatil.com, quien cuestionó las nuevas políticas de la entidad emisora por entender que no son realistas y que profundizarán la recesión económica.

Como parte del acuerdo que busca frenar la depreciación del peso y la crisis económica, Argentina adoptó un esquema de flotación cambiaria que se fijó entre los 34 y 44 pesos por dólar y se ajustará a una tasa del 3% mensual hasta fin de año.

Si la moneda se deprecia por encima de los 44 pesos por dólar la autoridad monetaria podrá intervenir ofertando hasta 150 millones de dólares diarios. Si la moneda se aprecia respecto del dólar por debajo de los 34 pesos, el Banco Central accionará mediante la compra de divisas.

Esa banda es políticamente correcta para algunos, pero falsa, dijo Trovato, para quien el valor de la divisa está en alrededor de 62 pesos y el mercado lo sabe.

El economista consideró que el argentino, que tiene memoria inmunológica ve que pierde valor adquisitivo por la inflación y automáticamente repudia el peso y se refugia en el dólar.

El Banco Central también anunció a través de sus nuevas autoridades que no emitirá pesos y reducirá a cero el crecimiento de la base monetaria -el dinero circulante más los depósitos a la vista- hasta junio de 2019.

Esto implicará una severa restricción de la liquidez y una contracción monetaria con claras implicaciones adversas para la actividad económica, dijo Alberto Ramos, responsable de Economía Latinoamericana en Goldman Sachs.

Según Trovato, la recesión durará al menos dos años.

Otros analistas cuestionaron que el Banco Central diera a conocer los detalles del mecanismo de intervención en el mercado de cambio. El economista Miguel Ángel Broda señaló que "las bandas (de flotación) deberían ser no especificadas y no fijas.

Pero el presidente argentino Mauricio Macri se congratuló en un acto oficial de que Argentina sellara con el órgano crediticio un acuerdo inédito para un país y afirmó que la comunidad internacional apoya al gobierno más que nunca.

Saben más que nadie las dificultades que estamos enfrentando. Y por eso valoran más que nadie que sigamos firmes en este camino, que enfrentemos cada dificultad sin cambiar las reglas, sin volver a las trampas, al atajo, dijo el mandatario, quien ha anunciado que buscará la reelección en 2019.

El índice Merval de las acciones líderes subía levemente 0,53% a las 1845 GMT. En tanto las acciones argentinas en Nueva York tenían rendimientos dispares.

Varios economistas señalaron que si bien las nuevas políticas traerán aparejada una mayor recesión y más descontento social, permitirán bajar la inflación. Según el Banco Central el alza del costo de vida será de al menos 40% este año.

Además valoraron positivamente que Argentina despeje la duda sobre el riesgo de caer en un cese de pagos.

El FMI amplió en 7.100 millones de dólares el acuerdo firmado con el país en junio por 50.000 millones en medio de una crisis cambiaria que se había iniciado un mes antes y resolvió adelantar fondos. Este año Argentina recibirá 13.400 millones de dólares mientras que en 2019 la cantidad se elevará a 22.800 millones. El acuerdo con el Fondo supone un drástico recorte del déficit fiscal.

Desde comienzos de año el peso ha perdido más del 50% de su valor y esa depreciación ha recalentado los precios e incrementado las protestas.