Djokovic, a su 11ma semifinal seguida del US Open
NUEVA YORK (AP) Novak Djokovic jamás perdió la calma. Ni siquiera con una solicitud inusitada de su rival para cambiarse la camiseta empapada en sudor y los zapatos a la mitad de un set.
Tampoco con las repetidas infracciones por la expiración del reloj de saque, ni con los 16 puntos para quiebre que dilapidó.
Y al final, el serbio logró lo que Roger Federar no pudo hacer dos noches antes: Doblegar al australiano John Millman, 55to del escalafón mundial, en el Abierto de Estados Unidos.
Djokovic dio un paso más hacia su tercer título en Flushing Meadows y hacia su 14to cetro de Grand Slam, al doblegar el miércoles 6-3, 6-4, 6-4 al australiano Millman. Avanzó así a su 11ma semifinal en forma consecutiva dentro de este certamen, sin tomar en cuenta desde luego la edición del año pasado, de la que se ausentó por una lesión del codo derecho.
El serbio, 6to preclasificado y quien conquistó Wimbledon en julio, quedó en una parte del cuadro que lo encaminaba a chocar ante Federer en cuartos de final. Millman echó a perder esos planes, al sorprender al suizo, 20 veces campeón en las grandes citas.
Yo mismo, junto con muchas otras personas, esperaba un partido contra Federer, dijo Djokovic.
Durante esa noche calurosa y húmeda de lunes, Federer dijo que se había quedado sin energía y que tuvo dificultades para respirar.
La velada del miércoles fue más fresca, con temperaturas de unos 26 grados Celsius (79 F), pero la humedad rebasó el 80%. Escurriendo sudor, Millman pidió permiso para cambiarse de ropa cuando el segundo set estaba igualado 2-2.
Ya era raro que un jugador pudiera hacer eso durante un parcial y no después de éste. Más extraña resultó la solicitud tras un número par de games y no en el cambio de cancha que hubiera seguido a un número impar.
Yo tenía dificultades, él también. Todos estábamos sudando. Cambiamos muchas camisetas y pantaloncillos, dijo Djokovic, Simplemente traté de encontrar la forma de seguir ahí.
Por el pasaje a la final, Djokovic chocará ante Kei Nishikori, quien venció al croata Marin Cilic tras un duelo de cinco sets. En la revancha de la final que perdió en 2014, Nishikori emergió victorioso por 2-6, 6-4, 7-6 (5), 4-6, 6-4.
Junto con Naomi Osaka en las mujeres, Nishikori protagonizó un memorable día japonés en el certamen.
Las victorias de ambos aseguraron que Japón tendrá semifinalistas en ambos cuadros de un mismo Grand Slam por primera vez en la era profesional del tenis.
Osaka, una promesa hecha realidad a sus 20 años, desembarcó en la primera semifinal de un grande en su carrera al despachar 6-1, 6-1 a Lesia Tsurenko.
Empleó apenas 57 minutos para vencer a la ucraniana, su tercera victoria en cinco partidos aquí en la que alcanzó la hora de juego. Por su parte, Nishikori requirió de 4 horas y 8 minutos.
Solo una vez en la era profesional que comenzó en 1968, Japón había contado con representantes en la ronda de cuartos de final de un mismo Slam. Ese fue el torneo de Wimbledon de 1995, cuando tanto Kimiko Date y Shuzo Matsuoka sucumbieron en dicha fase.
Osaka enfrentará en semifinales a Madison Keys, la subcampeona del año pasado que derrotó 6-4, 6-3 a la española Carla Suárez Navarro.
Hija de padre haitiano y madre japonesa, Osaka se mudó de Japón a Nueva York cuando tenía 3 años. Su mejor actuación en una de las grandes citas se ha producido en el mismo torneo al que acudió cuando era una niña.
Esto es algo con un enorme significado para mí, dijo Osaka. Siempre pensé que si algún día iba a ganar un Grand Slam, el primero que deseaba ganar era el US Open, porque aquí crecí y así mis abuelos podían venir a verme.
Osaka, quien este año conquistó su primer título en Indian Wells, se caracteriza por su personalidad tímida y el candor de sus respuestas, muchas veces cargadas con un tono sardónico.
Al preguntársele sobre el grado de interés que hay en Japón por sus victorias, Osaka mencionó que se lo debe en cierta medida a Nishikori.
Estoy muy agradecida de recibir tanta cobertura en la prensa japonesa. Creo que eso es por Kei, dijo.
Hizo también un gesto con sus manos para describir que el 21er cabeza de serie es mucho más grande que ella.
Osaka añadió que recién este año empezó a charlar más con Nishikori, ocho años mayor que ella. Ambos comparten la afición por los videojuegos.
Espero no meterme en un problema por decir esto, pero él es como un niño grande, señaló Osaka. No podría describirlo. Le gustan los videojuegos y cosas así también. Somos iguales en ese sentido. Es muy agradable, positivo y risueño.
Nishikori contó que el único inconveniente radica en que la predilección de videojuegos de ambos es distinta: No jugamos lo mismo, ojalá en el futuro. Tenemos que resolver eso.
Tú la miras y es alguien madura y que se ve como una persona grande, pero cuando hablamos también es una niña, añadió Nishikori, echándose a reír.
Para Nishikori, su marcha en este US Open consolida su regreso al circuito tras una cirugía en la muñeca que le impidió competir en la edición del año pasado.
Cilic venció a Nishikori en sets corridos en la final de hace cuatro años para el único título en un Slam de su carrera. El japonés siempre ha dicho que jugó nervioso ese partido.