Luciano Pereyra rememora su amor por la música mexicana
CIUDAD DE MÉXICO (AP) Luciano Pereyra considera a México una gran garganta.
No solamente por sus cantores, por su gente, tiene México en la garganta su lucha, su poesía, sus artistas. Y admiro eso. Para mí México es una gran voz, dijo el cantautor argentino en una entrevista reciente en la capital mexicana a propósito de su próximo debut en el Lunario del Auditorio Nacional.
Su amor por este país se remonta a su padre, quien a su vez se vio imbuido en la música mexicana por su hermano mayor.
El tío de Pereyra era un músico demasiado bohemio. Se perdía por dos o tres días y cuando llegaba se ponía en la cocina a cantarle a mi abuela canciones de mariachi y mi padre dice que desde la habitación lo espiaba, contó a The Associated Press tras una presentación a la prensa en la que interpretó con su guitarra algunos de sus éxitos, incluidos Qué suerte tiene él y Enséñame a vivir sin ti, y canciones populares como Zamba para olvidar.
Dijo que no pasó mucho tiempo desde que su padre escuchara a su hermano cantar música regional mexicana para que decidiera ponerse él mismo un traje de mariachi y presentarse en las fiestas populares de Concordia en la provincia de Entre Ríos, de donde es originario. Gracias a su padre, Pereyra dice que se crio con los discos de Miguel Aceves Mejía, Juan Gabriel, Vicente Fernández.
Yo escuchaba todo eso y en las guitarreadas que se armaban en la casa de mi viejo, mi papá no podía dejar de cantar eso, cantaba siempre algo mexicano, apuntó el cantante nacido en Luján.
Poco se imaginaba que años después compartiría escenario con Juan Gabriel y Paty Cantú en el Auditorio Nacional. A Juan Gabriel lo conoció hace unos seis años, después de pasar por problemas del esófago por los que había dejado de cantar. Juan Gabriel lo llamó para preguntarle cómo estaba su voz y lo invitó a Cancún, donde vivía el Divo de Juárez.
No quería cantar... y de repente yo me encontraba en un estudio de grabación con Juan Gabriel detrás mío marcándome lo que tenía que cantar y cantando mariachi, recordó.
Después Juan Gabriel invitó a Pereyra al Auditorio Nacional en 2013 para interpretar Déjame y una vez más para un concierto en el Luna Park en 2014. Con su amiga Paty Cantú, con quien interpreta Enséñame a vivir sin ti, Pereyra regresó al Coloso de Reforma en 2016, pero no ha dado un concierto como solista en los escenarios mexicanos.
Ahora tendrá la oportunidad de hacerlo en el Lunario del Auditorio Nacional el 25 de octubre para presentar las canciones de su más reciente álbum, La vida al viento, que ha sido certificado doble platino en Argentina.
En todos estos años su padre no ha dejado de cantar música mexicana. Tiene un grupo de mariachi y recién el fin de semana pasado participó con éste en el encuentro Buenos Aires celebra México.
Más allá de la admiración por la música mexicana tengo un amor aparte, paralelo, hermoso por parte de familia, dijo Pereyra, nominado a un Latin Grammy en 2016 por el álbum Tu mano, quien celebrará más de 20 años de trayectoria con su actuación en el Lunario.
Su padre no estuvo en México cuando Pereyra cantó con Juan Gabriel, pero el cantante tiene la esperanza de que asista a este concierto. De hacerlo, sería la primera vez que viaja al país que tanto ha admirado. Por ahora estuvo junto a su madre en su primera gira por Estados Unidos, que incluyó fechas en Nueva York, Los Ángeles y Miami.
Fue una gira buenísima, dijo Pereyra, quien se presentará el 17 de agosto en el festival Atahualpa de Tucumán, Argentina. Me acompañaron mis padres y un grupo de amigos que también me acompañó mientras estaba grabando el disco. Disfruté mucho de la gira, más allá de lo que tenía profesionalmente, personalmente fue muy emotiva, fue genial.