Goles, diamantes y barba: el Mundial de Cristiano Ronaldo
MOSC (AP) Cristiano Ronaldo salió al calentamiento en un soleado estadio Luzhniki con un diamante colgado de cada lóbulo de sus orejas y una incipiente barba, como de cabra, que le abarcaba apenas la punta del mentón.
El astro portugués volvió a encandilar, incluso antes del silbatazo inicial del partido. Y procedió a marcar otro gol, su cuarto en el Mundial de Rusia, con lo que Portugal superó 1-0 a Marruecos.
Sin lucir las gemas, Cristiano cabeceó el centro de Joao Moutinho a los cuatro minutos para convertirse en el máximo goleador europeo de la historia a nivel de selecciones, festejándolo con su clásico sprint hacia un córner. Ello bastó para vencer a un tenaz Marruecos y acercar a los campeones de Europa a la siguiente fase.
Goleador voraz, presumido. Triunfador, quejoso.
Es como el vino de Oporto, resaltó el seleccionador portugués Fernando Santos. Sabe cómo refinar su capacidad y su edad.
De por medio está su mano a mano con Lionel Messi, la gran rivalidad de este deporte. Se han dividido por igual los últimos diez premios al mejor futbolista del año. Cristiano ha ganado cuatro títulos de la Liga de Campeones con el Real Madrid, mientras que Messi suma tres con el Barcelona.
Cristiano se desvive por la atención. Después del primero de sus tres goles ante España en el debut la semana pasada, se frotó la barbilla durante el festejo.
Adidas, patrocinador de Messi, tiene una campaña publicitaria en la que destaca al argentino como el mejor jugador de todos los tiempos (GOAT, por sus siglas en inglés). Pero goat significa también cabra y chivo en inglés.
Y varios han encontrado en ello la explicación del gesto de Cristiano, frotándose el mentón y dejándose crecer esa pequeña barba.
En todo, Cristiano se entrega al máximo en ser el mejor, ya sea en su preparación física, nutrición y descanso.
Hace todo lo posible para mejorar cada día, comentó el zaguero portugués Cedric.
¿Podrá mantenerse a un nivel para disputar un quinto Mundial en 2022 con 37 años?
Su capacidad física, su técnica, su habilidad, siempre está en evolución, dijo Santos. Está constantemente metido en el juego, al contrario que otros jugadores. Se conoce a sí mismo y sabe que es lo que puede hacer. Esto que está haciendo ahora es distinto a lo que hacía hace tres o cuatro años.