A 4 años, corrupción sigue manchando Mundial de Brasil
RÍO DE JANEIRO (AP) Cuatro años después del Mundial en Brasil, las abarcadoras pesquisas sobre corrupción han dejado libres de sospecha apenas a dos de los 12 estadios. Los recintos privados de Curitiba y Porto Alegre enfrentan sin embargo otros problemas, tanto administrativos como de otra índole.
A continuación, datos actualizados sobre la situación de los estadios que se utilizaron en Brasil 2014.
MARACANÁ
El exgobernador Sergio Cabral ha sido arrestado por malversación de fondos públicos destinados originalmente para obras mundialistas. Uno de los contratos contemplaba la remodelación del emblemático Maracaná en Río de Janeiro, con capacidad para 79.000 personas y sede de la final.
Un empresario dijo a los fiscales que pagó sobornos a Cabral de parte de la constructora Odebrecht. Un anillo con un precio estimado de 300.000 dólares habría representado el primer pago por la remodelación.
El estadio fue rediseñado otra vez para los Juegos Olímpicos de 2016. En 2017, los equipos de Río evitaron usar el Maracaná, en medio de una disputa entre el gobierno estatal y las empresas que operaban el inmueble, incluida Odebrecht. Este conflicto se ha sumado a una deuda de unos 45 millones de dólares que tienen los administradores del estadio con las autoridades.
Dichos administradores señalan que no obtuvieron permiso para demoler áreas cercanas a fin de construir bares, estacionamientos y otras instalaciones. Recurrieron a los tribunales para dejar de operar el estadio.
Este año, los clubes locales decidieron que el Maracaná sea administrable al menos en los días en que juegan ahí.
ARENA CORINTHIANS
Este estadio para 49.000 espectadores fue sede del partido inaugural de la Copa del Mundo en Sao Paulo, y se le investiga como parte de la Operación Autolavado, que ha llevado al encarcelamiento del expresidente Luiz Inacio Lula da Silva y de otros políticos en América Latina.
Emilio Odebrecht, dueño de la empresa que lleva su apellido, dijo que el estadio fue un regalo para Lula, ferviente hincha de Corinthians.
El costo final del estadio no se ha determinado. El club y Odebrecht sostienen una pugna sobre quién debe pagar las cuentas pendientes que podrían ascender a 400 millones de dólares. El presidente de Corinthians, Andrés Sánchez, quien es también sujeto de investigación, ha manifestado su deseo de alcanzar un acuerdo para que Odebrecht se deslinde sin el cobro de una suma cuantiosa, debido a las obras inconclusas en el inmueble.
Frecuentemente, los partidos de Corinthans son los que más público atraen. Rara vez se reúnen menos de 30.000 hinchas en la arena.
MINEIRAO
Ejecutivos de la empacadora de carne JBS señalan que las obras de reconstrucción de este estadio para 62.000 personas en Belo Horizante se utilizaron para el pago de sobornos de unos ocho millones de dólares a campañas políticas del gobernador estatal Fernando Pimentel, cuya gestión ha sido asolada por denuncias de corrupción que él niega con insistencia.
Fue en el Mineirao donde Brasil sucumbió por 7-1 ante Alemania en las semifinales del Mundial.
El estadio es la casa principal de los gigantes locales Cruzeiro y Atlético Mineiro. Este último club ha seguido adelante con la construcción de un recinto en las inmediaciones de la ciudad, lo que podría afectar los ingresos del estadio mundialista.
MANE GARRINCHA
En mayo, dos exgobernadores del Distrito Federal fueron arrestados en relación con el remozamiento del Mane Garrincha, un estadio en Brasilia que rara vez se ha llenado a su capacidad máxima de 72.000 personas.
Agnelo Queiroz y José Roberto Arruda fueron acusados por un exejecutivo de la constructora Andrade Gutiérrez de recibir sobornos por la construcción.
Una corte local de auditorías señaló que el costo del estadio se infló en más de 30 millones de dólares, tan sólo en materiales de construcción. El costo final de la sede, en la que se llevan a cabo pocos partidos de fútbol, rebasa los 450 millones de dólares.
El estacionamiento del estadio es utilizado para aparcar autobuses desde que terminó el Mundial. El jueves, se registró la mejor afluencia en el año, cuando 6.000 personas presenciaron el triunfo de Flamengo por 2-0 sobre Fluminense en el campeonato brasileño.
FONTE NOVA
El estadio para 50.000 hinchas en Salvador, donde Holanda aplastó 5-1 a España, tuvo un presupuesto que se habría inflado por más de 35 millones de dólares.
La policía federal de Brasil afirma que podrían descubrirse varios ilícitos en la reconstrucción del inmueble, incluyendo fraude, malversación de recursos públicos y lavado de dinero. Una investigación en curso acusó al exgobernador Jacques Wagner de estar involucrado. El funcionario niega los cargos.
Después de que fue demolido el estadio original, la policía informó que los costos de construcción de Fonte Nova fueron exagerados en unos 130 millones de dólares. Buena parte de la diferencia entre ambos montos se empleó para campañas políticas.
El club local Bahía, que juega en la máxima división de Brasil, llena el 60% del estadio en promedio.
ARENA PERNAMBUCO
La policía federal brasileña indica que este inmueble de 46.000 butacas en Recife tuvo un costo inflado en más de 25 millones de dólares.
Un exejecutivo comentó que Odebrecht buscaba construir el nuevo estadio un año antes de que se ofrecieran los derechos de tenencia sobre el mismo. Una corte local de auditorías informó en 2016 que había 21 irregularidades en el contrato para la construcción del recinto.
Los 26 kilómetros (17 millas) que separan Recife del pequeño poblado de Sao Lourenco da Mata, donde se ubica el estadio, implican que pocos fanáticos se muestran dispuestos a asistir.
ARENA CASTELAO
En 2017, un magistrado de la Suprema Corte de Justicia pidió a los fiscales investigar el acuerdo entre las empresas de Grupo Odebrecht y el grupo Engenharia Carioca para las obras de construcción en la Arena Castelao de Foraleza, que tiene aforo para 67.000 hinchas.
El magistrado Luiz Edson Fachin consideró que el acuerdo permitió que las empresas defraudaran el proceso de licitación. Ambas compañías niegan haber cometido actos indebidos.
El costo total del estadio se calcula en 160 millones de dólares. Los clubes locales, ninguno de los cuales juega en primera división, tienen dificultades para pagar el 7% de sus ingresos en taquilla cada vez que alquilan el inmueble.
Los partidos en fortaleza no suelen atraer a más de 10.000 espectadores, de modo que los clubes prefieren usar un estadio más pequeño y céntrico, en vez de jugar en el Castelao, que se ubica en la periferia.
ARENA DAS DUNAS
Un exlíder de la cámara de diputados y el secretario de turismo de Natal fueron encarcelados por cargos de corrupción relacionados con el estadio de 32.000 asientos.
Henrique Eduardo Alves fue acusado de recibir sobornos hasta por 22 millones de dólares, para usarlos en campañas políticas.
La policía señala que en el ilícito colaboró otro líder legislativo que está ya en prisión, Eduardo Cunha. La investigación señala que Alves y Cunha extorsionaron a las dos empresas constructoras involucradas en el proyecto.
El estadio costó unos 130 millones de dólares. Hace dos años, su déficit fue de 10 millones. Natal no tiene clubes en la máxima categoría de Brasil, y la Arena das Dunas suele estar vacía.
BEIRA-RIO
La firma Andrade Gutiérrez, implicada por la investigación Autolavado, trata de vender su participación de 50% en este inmueble para 51.000 hinchas, ubicado en Porto Alegre.
El presidente del consejo Ricardo Sena explica que quiere desvincularse de proyectos en Brasil, pero tiene un contrato con el club Internacional por los próximos 16 años.
Ese equipo de Porto Alegre, que volvió recién a la primera división, ha atraído a su mayor número de seguidores en años.
ARENA DA BAIXADA
No se corrigió la situación con varios lugares del graderío para 42.000 aficionados, desde donde no se puede ver la cancha. Y ése no es el único problema ni de lejos.
Un abogado del Atlético Paranaense, dueño del estadio, comentó que éste será subastado si el gobierno local insiste en cobrar adeudos de unos 58 millones de dólares por préstamos auspiciados por el gobierno para concluir el inmueble.
La asistencia de aficionados al recinto ha sido también escasa desde el Mundial.
ARENA PANTANAL
El exgobernador Silval Barbosa testificó antes de un acuerdo extrajudicial que el constructor Mendes Junior pagó sobornos por el 3% del valor total de la obra, que se elevó de 90 millones de dólares en 2010 a 170 millones.
Barbosa indicó que él y otros prominentes funcionarios recibieron los pagos. El estadio está inconcluso. Cuiabá no tiene equipo profesional de fútbol y los operadores del estadio tratan de atraer a clubes de otras ciudades.
ARENA AMAZONIA
Exejecutivos de Odebrecht dijeron, antes de arreglos para evitar juicios, que se inflaron los costos también en el estadio de Manaos. Una corte federal de auditoría informó que el sobrecosto fue de 25 millones de dólares.
Desde el Mundial, el estadio ha acumulado un déficit de al menos seis millones de dólares. Se le usa tan escasamente que un juez ha sugerido aprovecharlo como cárcel temporal.