Interrumpen con abucheos discurso del presidente filipino
KAWIT, Filipinas (AP) Un grupo de activistas de izquierda abucheó e interrumpió el martes el discurso que el presidente de Filipinas estaba ofreciendo por el día de independencia y lo llamó "traidor", en medio de críticas sobre su manejo de disputas territoriales con China.
El presidente Rodrigo Duterte detuvo brevemente su discurso, que estaba siendo televisado en vivo. Tras el escándalo, miró con calma desde un balcón histórico en Kawit, al sur de Manila, cómo la policía se llevaba a los manifestantes. Pidió a los agentes que intervinieran con "máxima tolerancia" mientras la gente, entre ellos algunos embajadores, esperaba.
"Solo déjenlos... nuestra constitución garantiza libertad de expresión, libertad de reunión y expresión", dijo Duterte mientras algunos de los jóvenes del pequeño grupo de manifestantes gritaban "Destituyan a Duterte", "Traidor" y "Facista".
El presidente reanudó luego su discurso, que se enfocó en la lucha contra las drogas, la corrupción y el terrorismo. Habló desde la casa de Cavite, en la provincia donde Filipinas declaró su independencia de España el 12 de junio de 1898.
"Quizás no nos entendemos el uno al otro, pero al menos hay un común denominador y eso es el amor a la patria", dijo Duterte. "Nadie, nadie puede poner mi amor por la patria en tela de juicio".
Los críticos de Duterte han dicho que él fue muy indulgente con China en cuanto a la disputa por territorios en el Mar de China. Los funcionarios del gobierno actual alegan que el acuerdo que Duterte logró con China ha fomentado negociaciones sobre las viejas disputas que tienen y ha logrado fondos chinos para infraestructura, comercio e inversiones.
Según los críticos del presidente, la manera en que Duterte manejó ese asunto hizo que China aplique medidas cada vez más firmes en una de las vías marinas más transitadas del mundo. Ellos citan reportes que indican que los guardacostas chinos han abordado botes pesqueros filipinos varias veces y se han llevado sus pescas en los últimos meses en el área disputada de Scarborough, que China le quitó a Filipinas tras un tenso enfrentamiento en 2012.
